PIEDRAS VIVAS
CLE02 10
Yahweh Vs Faraón
03 - El Primer Grupo De Plagas
El Segundo Conflicto: La Vara Y Las Serpientes
Estudiemos ahora el segundo conflicto entre Yahweh y Faraón.
Yahweh les dijo a Mosheh y Aharón: "Cuando el Faraón les hable y les diga que presenten su prodigio, tú le dirás a Aharón: "Toma tu vara y arrójala delante del Faraón". Y se convertirá en una serpiente". Así Mosheh y Aharón se presentaron ante el Faraón e hicieron tal como Yahweh les había mandado: Aharón arrojó su vara en presencia del Faraón y de sus cortesanos, y se convirtió en una serpiente. Entonces el Faraón, por su parte, convocó a los sabios y a los hechiceros; y los magos mitsritas, a su vez, hicieron lo mismo con sus hechizos; cada cual arrojó su vara, y se convirtieron en serpientes. Pero la vara de Aharón se tragó las varas de ellos. No obstante, el corazón del Faraón se endureció y no les hizo caso, como había dicho Yahweh. Shemot 7:8-13
Esta es la presentación pública de los hechos. En el primer conflicto, se presentó el caso: las exigencias de Yahweh vs la oposición y resistencia de Faraón. En este segundo conflicto todavía no hemos llegado a las plagas, aquí se expone el pecado y se indica sobre qué será el juicio: la rebeldía de haSatán en obedecer la orden de Yahweh de liberar al pueblo yisraelita. Esta era una señal para los cielos pero también para los hombres, mucho más para nosotros que tenemos una comprensión más clara de las cosas. Dudo que Faraón y sus siervos se hayan dado cuenta de que el significado de este milagro consistía en exponer el hecho de que su vida estaba bajo la mano usurpadora de haSatán, que su vivir en Mitzrayim se encontraba bajo la usurpación y la posesión del satán. Faraón y su pueblo confiaban en los recursos naturales de Mitzrayim, y particularmente en la rica provisión del Nilo. Cuando tenían buena cosecha, agradecían al Nilo, su dios (y al resto de los dioses, por supuesto). Esta provisión era su "vara", una vara que en realidad era una serpiente. A los ojos de Elohim, Faraón y los egipcios confiaban en haSatán y vivían bajo su mano usurpadora.
El hecho de exponerlos no era aún un castigo, sino la expresión de la misericordia de Elohim. En Su misericordia, Elohim expuso la verdadera naturaleza del vivir egipcio. El quería que los egipcios supieran que todas las cosas en las cuales confiaban pertenecían al diablo. El juicio era a haSatán, pero todos los que insistieran en seguirlo también caerían junto con él. Al exponer la serpiente, la intención de Elohim consistía en que ellos rechazaran esta clase de vida. El principio es el mismo hoy en día. Cuando Elohim se presenta a nosotros, Él primero no castiga el ego, ni la carne, ni el viejo hombre. En Su misericordia, Él primero expone la naturaleza satánica de nuestra vida caída. Esta es la presentación formal de las cosas, lo que Yahweh está diciendo aquí es "Todo lo que tienen en sus manos, todas las cosas en las que confían, toda la prosperidad que creen tener por sus propias fuerzas no son sino rebelión contra Mí, que soy Su Creador. Yo les doy el producto de la tierra, y ustedes agradecen a quienes no les dan nada, sino que los explotan y los engañan. Vean la realidad de aquello en lo que se apoyan, y sean libres, porque esta serpiente está siendo juzgada, y si insisten en seguirla, seguirán su suerte".
Exactamente lo mismo sucederá en los tiempos finales. Al principio vendrán las advertencias (en verdad, la Besorah es la mayor de las advertencias, pero los hombres no creen en ella, en buena medida porque sus mismos seguidores no son el mejor ejemplo), para exponer al mundo la realidad de aquello que creen es la base de sus vidas.
Faraón llamó a los magos para que hicieran con sus varas lo mismo que había hecho Aharón con la suya (7:11). Muchos se preguntan por qué Yahweh permitió que los magos imitaran Sus señales. Las primeras tres señales, junto la señal de la vara en serpiente, son las únicas que realiza Aharón, y además son las únicas que son imitadas por los magos, excepto la de los piojos. Desde que fueron abiertos los sellos hasta el día de hoy, falsos profetas han salido a imitar el Mensaje de las Buenas Nuevas, engañando a muchos.
Podemos comparar a los filósofos del mundo actual con estos magos. Estos filósofos quizá enseñen cosas parecidas a lo que predicamos en la Besorah. Podemos exponer la naturaleza de la vida humana caída (la serpiente), y ellos pueden APARENTAR hacer lo mismo. Podemos hablar acerca de las preocupaciones de la vida en el mundo (la sangre), y ellos pueden APARENTAR hacer lo mismo. Podemos hablar acerca de los malos espíritus que nos influyen y confunden (las ranas), y ellos también pueden hacer lo mismo. No obstante, así como la vara de Aharón devoró las varas de los magos egipcios, la predicación de la Besorah también devora las enseñanzas filosóficas actuales.
Los magos pudieron repetir estas tres primeras señales PORQUE SON LAS QUE EXPONEN LAS OBRAS DE HASATÁN Y EL MUNDO. De manera que son las obras de los propios magos. Ciertamente ellos saben llamar a la serpiente, saben producir sangre y saben traer ranas, no sorprende que acá hayan imitado LO QUE ELLOS MISMOS PRACTICAN. Yahweh aquí estaba exponiendo también sus obras, exponiendo al mundo que sus "magos", sus falsos profetas, ciertamente pueden también hacer señales, pero son señales de su padre el satán. Al imitar las señales, ellos estaban simplemente afirmando lo que Yahweh pretendía que el mundo viera: que los magos hacen las obras de haSatán, la serpiente, trayendo muerte (sangre) e invocando demonios (las ranas).
Hemos experimentado esto muchas veces en la historia y en la misma actualidad. Ciertas enseñanzas son casi iguales a las enseñanzas bíblicas. Por ejemplo, las Escrituras enseñan que no debemos amar al mundo. Algunos filósofos chinos y el budismo, por ejemplo, enseñaron lo mismo. No obstante, en nuestra predicación de la Besorah, la vara de Aharón devoró las varas de los "magos".
La Besorah devora todas las filosofías del mundo. Vivimos en un época de terrible caos y confusión NO PORQUE SEA PEOR QUE OTRAS, SINO PORQUE HOY TENEMOS LOS MEDIOS DE VER LO QUE SUCEDE EN TODAS PARTES. Antes también existían las mismas confusiones, ya hemos visto que desde los primeros días de la congregación surgieron estos falsos profetas con sus falsas doctrinas y que son las mismas de la actualidad, pero internet trae el mundo a nuestras vidas, y nos muestra todo lo que abarca. No es que antes fuera menos, es que no había medios de ver el todo. Así que no nos sintamos amenazados ni desanimados en la predicación de la Besorah. Por el contrario, creamos que nuestra vara devorará las varas filosóficas y religiosas del mundo. Nada puede vencer la Besorah. Por esta razón, la Besorah puede devorar a las varas de los filósofos del mundo.
En el pasuk 13 vemos el resultado del segundo conflicto: 'El corazón de Faraón se endureció, y no los escuchó, como Yahweh lo había dicho". Acá tenemos el resultado de la promesa de Yahweh de que Él endurecería el corazón de Faraón. Él utilizaría a Faraón para manifestar a través de él toda la maldad de Egipto, del mundo, de haSatán y de las obras satánicas, y sabía muy bien que únicamente necesitaba EXIGIR LA OBEDIENCIA QUE LE ERA Y ES DEBIDA PARA QUE FARAÓN MANIFESTARA SU VERDADERA NATURALEZA REBELDE Y SOBERBIA, COMO HIJO DE LA SERPIENTE, Y RESPONDIERA ENDURECIENDO SU CORAZÓN.
El resultado inmediato de este conflicto fue el hecho de que Faraón rehusó dejar ir a los hijos de Yisrael. La primera vez que Elohim vino, Faraón rehusó escuchar Su palabra. Esta vez, Faraón rehusó obedecer la orden de Elohim, aún después de que Elohim hubiese expuesto la naturaleza de vida en el mundo bajo haSatán. Esto hizo que Elohim pasara a la siguiente fase: disciplinar a Faraón con más severidad en el tercer conflicto.
Confrontando Shemot con Hitgalut, esta acción de exponer a la serpiente, el pecado, corresponde a la apertura de los 4 primeros sellos que liberan a los jinetes del ruaj del antiMashíaj, la guerra, la pestilencia y el hambre. Estas cuatro cosas son los productos del reino de haSatán, y a través de ellas ha gobernado al mundo. En Hitgalut, la liberación de los jinetes no es para castigo de la tierra, sino para que los hombres VEAN estas "serpientes" expuestas. Sin embargo, Yahweh sabe bien que exigir obediencia al mayor de los rebeldes sólo provocará su endurecimiento; y cuando haSatán se endurece, endurece también los corazones de sus hijos. En estos 2000 años hemos visto cómo el mundo ha empeorado y no de forma gradual, sino aceleradamente, aumentando las guerras, las epidemias y enfermedades, el hambre y la muerte, todo generado directa e indirectamente por los hombres que trabajan para el reino satánico, y por ese mismo motivo el jinete que más ha crecido es el ruaj del antiMashíaj, que galopa victorioso... por ahora.
Lamentablemente, ayer como hoy el mundo no ha querido ver que todas estas cosas son las obras de haSatán, y como siempre, ha preferido aceptar sus mentiras y engaños.
La Primera Plaga: La Sangre
Y Yahweh le dijo a Mosheh: El Faraón es obstinado; se niega a dejar ir al pueblo. Ve al Faraón en la mañana, cuando vaya saliendo del agua, y plántate delante de él a la orilla del río, y lleva contigo la vara que se convirtió en serpiente. Y dile: "Yahweh, el Elohim de los hebreos, me envía a decirte: "Deja ir a mi pueblo para que me adoren en el desierto". Pero usted no ha hecho caso hasta ahora. Así dice Yahweh: Por esto sabrás que yo soy Yahweh. Mira, yo GOLPEARÉ (NAKÁ, H5221) el agua del Río con la vara que tengo en mi mano, y se volverá sangre; y los peces del río morirán. El río apestará tanto que los mitsritas hallarán imposible beber el agua del río". Y Yahweh le dijo a Mosheh: "Dile a Aharón que tome su vara y sostenga su brazo sobre las aguas de Mitsráyim –sus ríos, sus canales, sus lagunas, todos sus cuerpos de agua– para que se conviertan en sangre; habrá sangre por toda la tierra de Mitsráyim, hasta en las vasijas de madera y de piedra". Mosheh y Aharón hicieron tal como Yahweh les había mandado: levantó la vara y golpeó el agua del río a la vista del Faraón y de sus cortesanos, y toda el agua del río se convirtió en sangre, y los peces del río se murieron. El río apestaba tanto que los mitsritas no podían beber agua del río; y había sangre por toda la tierra de Mitsráyim. Pero cuando los magos mitsritas hicieron lo mismo con sus hechizos, el corazón del Faraón se endureció y no les hizo caso –tal como había dicho Yahweh. El Faraón se volvió y se fue a su palacio, sin tan siquiera prestar atención a esto. Y todos los mitsritas tuvieron que cavar alrededor del río para buscar agua potable, porque no podían beber el agua del río. Shemot 7:14-24
Este conflicto se produjo por la mañana a la orilla del río Nilo. Dos conflictos más se produjeron también temprano por la mañana (la plaga de moscas y la de granizo).
Tebas era la capital del país durante el período de los faraones de la decimoctava dinastía, pero es difícilmente concebible que Moisés realizara esos milagros allí, a centenares de kilómetros al sur del delta, donde estaba situada la tierra de Goshen. El pasaje del Tehilim 78:43 se refiere a las plagas como que se efectuaron "en Tsoán":
...cuando ejecutó en Mitsráyim sus señales, sus maravillas en la llanura de Tsoán. Tehilim 78:43
Ya que la Tsoán bíblica es la antigua Tanis, en la parte oriental del delta —una ciudad construida siete años después que Hebrón en Palestina, como se cita en Bamidbar 13:22—, debe ser que el rey estaba residiendo temporalmente en Tanis, o cerca de ella (probablemente por causa de la construcción de las ciudades de almacenamiento), durante el tiempo de las plagas. Se sabe que había palacios reales en varias partes del país.
Es posible que Faraón haya bajado al río para relajarse y disfrutar de un tiempo agradable. Pero esta relajación fue perturbada por la presencia de Moshe y de Aharón. Elohim les había encargado que volvieran a enfrentarse a Faraón presentándole Su exigencia. La intención de Elohim era mostrar a Faraón que no era tiempo para relajarse. Por el contrario, era tiempo de exponer la naturaleza de la vida en Mitzrayim. Los seguidores de Faraón tenían que ver que la vida en Mitzrayim no era una vida de descanso y de deleite, como el representante de haSatán mostraba, sino una vida de sangre. Actualmente debemos ir al lugar donde la gente mundana disfruta para exponerles el hecho de que todos sus entretenimientos mundanos y sus placeres dan por resultado la muerte.
Yahweh también advierte que GOLPEARÁ el agua del río, indicando que está poniendo juicio sobre las aguas. Veremos que esto también se repite en las siguientes plagas.
Moshe y Aharón repitieron la misma exigencia que habían hecho anteriormente: "Deja ir a Mi pueblo, para que Me sirva en el desierto", pero esta vez, la orden de Elohim fue respaldada por la primera plaga. También Yahweh se dio a conocer por Su Nombre a Faraón, cuando dice "En esto conocerás que Yo soy Yahweh..." (7:17). En el anterior encuentro Faraón había dicho: "¿Y quién es Yahweh para que yo le haga caso y deje ir a Yisrael? No conozco a Yahweh ni dejaré ir a Yisrael" (Shemot 5:2), y ahora Yahweh comenzaba a responderle. Ahora Él le mostraría a Faraón quién era ese Yahweh a quien él no conocía. Ya que Elohim es Yahweh, todo lo que Él dice sucede. Yahweh había dicho: "Deja ir a Mi pueblo". Faraón puede resistir a esta palabra, pero finalmente él será sometido y sabrá que Elohim es Yahweh.
Según el pasuk 19, Aharón debía tomar la vara y extender su mano "sobre las aguas de Mitzrayim, sobre sus ríos, sobre sus arroyos, y sobre sus estanques, y sobre todos sus depósitos de agua, para que se conviertan en sangre, y haya sangre por toda la región de Mitzrayim". Aharón hizo esto, y en todo el país de Mitzrayim, las aguas se convirtieron en sangre, aún las aguas en los vasos de madera como en los de piedra. Ya que las aguas del Nilo se cambiaron en sangre, los peces del río murieron, el río se corrompió, y los egipcios no podían beber de él (pasuk 21). Los egipcios excavaron cerca del río para beber agua, lo que significa que las que se convirtieron en agua fueron todas las aguas que estaban sobre la tierra, no las subterráneas.
La primera plaga muestra claramente que la vida de Mitzrayim, es decir, la vida del mundo, no desemboca en otra cosa que la muerte. No importa donde se encuentren las aguas del mundo, en un río, un estanque o vaso, de todos modos el resultado es muerte. La sangre fuera del cuerpo es muerte. Sólo la Sangre del Cordero es verdadera Vida. Esta plaga acompañaba a la advertencia y exposición anterior de la vara y las serpientes: ambas estaban exponiendo a haSatán y al verdadero rostro del mundo.
Al convertir las aguas del mundo en sangre, Elohim expone la verdadera naturaleza de los placeres mundanos. Él revela el hecho de que el pueblo en el mundo está bebiendo sangre. Según Hitgalut 16, hacia el final de la gran tribulación, Elohim volverá a cambiar las aguas del mundo en sangre. Esta sangre representa a la muerte, el resultado de una vida de pecado.
El tercer mensajero derramó su copa sobre los ríos y sobre las fuentes de las aguas, y se convirtieron en sangre. Oí al mensajero de las aguas decir: "Justo eres tú que eres y que eras, el Santo, porque has juzgado estas cosas. Porque ellos derramaron la sangre de los santos y de los profetas, tú también les has dado a beber sangre, porque se lo merecen". Hitgalut 16:4-6
Beber sangre es beber de la copa de iniquidad, es decir, asumir el castigo que es consecuencia del tipo de vida que se haya llevado. El contenido de la copa son todas las obras de la persona, y aquí son todas las obras de Egipto. Mitzrayim, con su grandioso Nilo, únicamente producía muerte. Y ya que los mitsritas aceptaban la situación, Yahweh les mostró lo que en verdad estaban bebiendo. Todas las obras del mundo son sangre. Pero mientras que en Shemot la sangre es simplemente la exposición del mal de mundo, en Hitgalut es una de las Copa de la Ira que beberán aquellos que no se hayan arrepentido a tiempo. Aquí es el comienzo del juicio, en Hitgalut se completará el mismo.
Entre esta primera plaga y la siguiente, Yahweh dejó pasar siete días; en ella expuso la vida egipcia, la vida del mundo. Esto es sombra de los siete días de la Gran Tribulación, durante cuyo tiempo también será predicada la Besorah entre persecuciones, para que los hombres vean la realidad de lo que adoran y se arrepientan, y habrá plagas para los que no se arrepientan.
Si los egipcios se hubiesen arrepentido, el hecho de quedar expuestos les habría abierto los ojos y habrían dejado de servir a haSatán. Ya que no se arrepintieron (y Yahweh ya sabía que eso sucedería, porque los mitsritas son tipo de los incrédulos y no-salvos del mundo) su rebeldía se convirtió en sentencia. Aún así, Yahweh les daría varias oportunidades más de arrepentirse, pero serían más graves. El principio es el mismo en la predicación de la Besorah actual. Si los pecadores reciben la palabra de la Besorah, esta palabra los expondrá simplemente, les abrirá los ojos. Pero si no la reciben, será para ellos una palabra de juicio. El Adón Yahshua indicó que aquellos que no reciban Su palabra serán juzgados por la misma palabra que rechazaron:
El que me rechaza y no recibe mis palabras tiene quien lo juzgue: La palabra que he hablado lo juzgará en el día final. Yahanan 12:48
Lo que Moshe atacó también fueron los poderes mágicos de Egipto. Luego seguirá atacando uno por uno de los dioses de los egipcios. En la primera plaga fue atacado el mismo Faraón, que decía ser la encarnación del dios, pero también los dioses del Nilo, que también fueron "golpeados" con esta plaga. El dios Hapi se decía que era el espíritu del Nilo. El gran dios Osiris se decía que tenía al Nilo como su torrente sanguíneo; durante esta plaga él realmente sangró. El mismo Nilo era adorado como un dios, y hay papiros que registran himnos cantados en alabanza al río.
Elohim usó a Moshe para juzgar todos los dioses de Egipto según está escrito:
Porque esa noche yo pasaré por la tierra de Mitsráyim y derribaré a cada primogénito en la tierra de Mitsráyim, tanto de hombre como de bestia; y les haré juicio a todas las deidades de Mitsráyim, yo Yahweh. Shemot 12:12
Este es el juicio al mundo y a su príncipe y su falso concilio, y aquí también fue juzgado el dios Khnum o Jnum, principal custodio de las aguas del Nilo. Khnum era el dios-carnero que según los egipcios creó a la humanidad. La leyenda egipcia de la creación del mundo por el dios Khnum dice:
"La lama del Nilo, calentada al máximo por el Sil, fermentó y generó, sin semillas, las razas de hombres y los animales".
Por esta razón Khnum era representado como un alfarero, creando a los hombres del barro. También resulta interesante notar que mientras Khnum era el dios del Nilo, su esposa Heket tenía la cabeza de una rana (la segunda plaga, ranas). De manera que en estas dos primeras plagas estamos viendo la exposición de los falsos dioses creadores de Mitzrayim, ya que ambos eran considerados los creadores de los hombres, dioses de la fertilidad.
Pero el río mismo también fue considerado un dios y por esto fue juzgado por el Elohim de los hebreos. Yahweh dice que él va a golpear las aguas del río, no Moshe. La vara de Moshe estaba también en la mano del Eterno. Vemos que hubo una colaboración íntima entre lo que estaba haciendo Moshe y lo que estaba haciendo Yahweh. Él estaba golpeando las aguas del río por medio de su emisario, Moshe.
Hay una significante mención de algo como esto en un papiro de este período, conocido como el papiro Ipuur. El relato se considera histórico. Muestra la caída del Imperio Antiguo de Egipto, o un lamento inspirado por el supuesto caos del Segundo período intermedio, varios siglos después o, posiblemente, una combinación de ambos sucesos. El papiro relata:
Ciertamente, los humildes se han convertido en poseedores de riquezas; el que no podía hacerse un par de sandalias es poseedor de riquezas. Ciertamente, de sus sirvientes, sus corazones son malvados; los grandes no confraternizan con sus gentes regocijadas. Ciertamente, los corazones son violentos; las plagas se propagan a través del país; la sangre está por todos lados; la muerte no escasea (...) Ciertamente, los ricos están en duelo mientras los humildes desbordan la alegría; todas las ciudades dicen: "Haz que expulsemos a los poderosos de entre nosotros". (...) Ciertamente, el río está ensangrentado, y cuando se bebe en él, uno se aparta de la gente y se anhela el agua. (...) las ciudades están destruidas y el Alto Egipto se ha convertido en tierras estériles. (FUENTE)
La primera plaga revela que Elohim es misericordioso y sabio. En esta plaga, Él no mató a los egipcios. El simplemente cambió las aguas en sangre para advertirlos y exponerlos. Egipto produce sangre, y el que insista, acabará teniendo que beber esa copa. Pero aquí es sólo la advertencia. Yahweh no hizo nada para perjudicarlos directamente aquí. Si Faraón hubiera aceptado el hecho de quedar expuesto, Elohim le habría mostrado misericordia. No obstante, ya que él lo rechazó, se convirtió en juicio. Elohim no es injusto en Su disciplina con el pueblo. Al contrario, Él es sabio y muy misericordioso. Por lo tanto, en el castigo de la primera plaga, vemos una advertencia misericordiosa.
Una vez más, los magos de Mitzrayim pudieron hacer lo mismo con sus hechizos que Moshe y Aharón con la vara. No obstante, aunque ellos pudieron traer sangre, no fueron capaces de quitarla. En sus tres tentativas de imitación los magos nunca consiguieron revertir la situación: podían imitar, pero nunca podían solucionar. Hoy en día, los filósofos del mundo pueden exponer el hecho de que la vida en el mundo es en realidad muerte, pero no tienen los medios de quitar la muerte, y por eso el mundo continúa condenado a beber la sangre de muerte. Pero si se arrepintieran, tendrían la oportunidad de beber la Sangre de Vida:
El que come mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna, y yo lo resucitaré en el día final. Yahanan 6:54
Convertir las aguas en sangre no implica que las aguas del Nilo simplemente "tomarían el color" de la sangre, como han interpretado este pasaje algunos comentadores, sino que en todo sentido y propósito se convertirían literalmente en sangre. Está fuera de lugar preguntar si esto se hubiera podido comprobar por las diversas pruebas modernas, microscópicas y de otra naturaleza, por las cuales se analiza la sangre.
Algunos dicen que cada plaga tiene una explicación natural. En el caso de la primera plaga, en algún punto el Nilo alcanza un máximo de flujo de corriente, la cual recolecta partículas finas de polvo rojo de la tierra, y esta tierra roja arrastra organismos las cuales tiñen el color del agua y matan a los pescados. El agua se veía como sangre y la gente pensaba que era sangre. No se trataba de agua teñida por la tierra roja de Abisinia.
Algunos han sugerido como causa probable una concentración elevada de "plantas e infusorios criptógamos", algo similar a la "marea roja" de microorganismos, que mata a millones de peces y que hace apestar las playas y las torna inhabitables a causa de un gas irritante que despide. Sería muy dudoso el hecho de que el agua alterada de este modo pudiera satisfacer todas las especificaciones de esta plaga bíblica. Pero si este fuera el caso, entonces también sería difícil el explicar el porqué Faraón estaría impresionado.
Por otra parte, esto tampoco haría que el momento de la aparición de estos organismos pudiera ser controlado por los seres humanos. Elohim pudo haber o no haber usado mecanismos naturales para llevar a cabo dichas plagas; y si Él lo hizo así, entonces de cualquier manera el tiempo y el carácter de las plagas vino de la mano de Elohim solamente.
Es importante entender que estas plagas eran todas literales; no había nada simbólico acerca de ellas. Cada plaga apuntaba a un mayor significado que al mismo evento, pero en realidad sucedieron. Esto guía nuestro entendimiento sobre las plagas en Hitgalut; no hay razón para verlas como cosas simbólicas.
Las plagas que Elohim trajo sobre Egipto tenían una estrategia y propósito definitivo. Cada una de ellas confronta y ataca a un preciado dios egipcio. No solamente trajeron castigo en contra de Egipto, las plagas también respondieron a la pregunta original de Faraón: ¿Quién es Yahweh, para que yo oiga su voz y deje ir a Yisrael? Las plagas muestran que Yahweh Elohim es más grande que cualquier deidad egipcia.
El resultado del tercer conflicto fue que por segunda vez la dureza del corazón de Faraón quedó expuesta. Una vez más él no escuchó a Moshe ni a Aharón. El pasuk 23 dice: "Y Faraón se volvió, y fue a su casa, y no dio atención tampoco a esto". La obstinación de Faraón hizo que él no tuviera un corazón para obedecer a las exigencias de Elohim. Por esta razón, fue necesario que cayera una segunda plaga sobre los egipcios.
La Segunda Plaga: Las Ranas
En el cuarto conflicto con Faraón, Elohim envió ranas a todo el territorio egipcio:
Yahweh le dijo a Mosheh: "Ve donde el Faraón y dile: "Así dice Yahweh: Deja ir a mi pueblo para que me adoren. Si rehúsas dejarlos ir, entonces yo CASTIGARÉ (NAGÁF, H5062) todo tu país con ranas. El Río se llenará de ranas, y éstas saldrán y se meterán en tu palacio, en tu dormitorio y en tu cama, en las casas de tus cortesanos y de tu gente, y en tus hornos y en tus vasijas de amasar. Las ranas subirán sobre ti y sobre tu gente y sobre todos tus cortesanos". Y Yahweh le dijo a Mosheh: "Dile a Aharón que extienda su brazo con la vara sobre los ríos, los canales, y las lagunas, y traiga las ranas sobre la tierra de Mitsráyim". Aharón extendió su brazo sobre las aguas de Mitsráyim, y subieron las ranas y cubrieron la tierra de Mitsráyim. Pero los magos hicieron lo mismo con sus hechizos, y trajeron ranas sobre la tierra de Mitsráyim. Shemot 8:1-7
Las ranas vinieron de las aguas, ríos, arroyos y estanques. Recordemos que 7 días antes las aguas habían sido convertidas en sangre, y habían muerto todos los peces que en ellas estaban. Esto contaminó seguramente al río, y finalmente provocó la expulsión de las ranas, que salieron a buscar un mejor hábitat. Esto es otra señal, porque las ranas saliendo de las aguas de muerte son los descendientes de los caídos, los espíritus de los nefilim que no tienen lugar de reposo. Esto fue lo que sucedió en el diluvio: las aguas cubrieron todo y todos murieron (simbolizados por los peces), pero al morir continuaron sobre la tierra como espíritus.
En la tercera plaga, también ejecutada por Aharón, Yahweh aún está advirtiendo y exponiendo: haSatán es una serpiente que gobierna al Nilo, las aguas de muerte, que producen demonios, las ranas. Y también se repite el concepto: Yahweh está castigando, golpeando para exponer, esta vez a los nefilim, los híbridos.
Las ranas eran consideradas sagradas para los mitsritas, y su diosa era Heket, esposa del dios Khnum. Ambos eran considerados dioses creadores, como dijimos.
Al caer sobre Faraón y todos sus siervos y todos los egipcios, las ranas destruyeron el deleite del vivir egipcio agradable. Eran muy molestas, asquerosas, pero no causaban daño directo. Al enviar esta plaga sobre los egipcios, Elohim deseaba que los egipcios se dieran cuenta de que su vida en Mitzrayim no era verdaderamente una vida de deleite, sino una vida de problemas. Los egipcios no se dieron cuenta de que a los ojos de Elohim, todo el deleite que tenían era "ranas". Todo lo que ellos recogían del Nilo, la fuente del provisión del mundo, eran cosas de demonios. Las aguas de Mitzrayim que antes produjeron peces ahora producían ranas.
En principio, podemos experimentar lo mismo hoy en día. Durante mi vida, he recogido muchas cosas que finalmente fueron "ranas". Al principio, disfrutaba de estas cosas, pero cuando desperté, las vi como lo que eran: "ranas". Finalmente, todas mostraron su verdadera cara demoníaca. Tarde o temprano, todo lo que obtenemos en este mundo se convertirá en una "rana", un demonio engañador. Esto significa que todo lo que recojamos del Nilo, la fuente de la provisión del mundo, causará problemas y tratará de poseernos y consumirnos. Las posesiones materiales y aún la gente pueden ser "ranas". Cuando las cosas que atesoramos se convierten en "ranas", entonces nos damos cuenta de que el deleite del mundo no es el verdadero deleite. Por el contrario, es muy molesto.
Las ranas de Mitzrayim no mataron a nadie, pero fueron una molestia para todos, porque ésta era parte de la exposición de las cosas. El que la plaga de las ranas fuese un tipo de castigo molesto o una revelación dependía de la actitud del pueblo que pasaba por la plaga. Si ellos hubieran recibido la misericordia de Elohim, la exposición de Mitzrayim y su deleite como tierra de ranas habría sido una revelación para ellos. Este es el significado del vivir del mundo. Todos los aspectos del deleite del mundo son una "rana". No obstante, los que rehusaban la misericordia de Elohim tenían que padecer la plaga de las ranas como castigo.
Como dijimos, los magos egipcios pudieron imitar tres de las cosas que hizo Aharón con su vara: cambiar el agua en sangre, cambiar la vara en serpiente, y producir ranas, porque son falsos profetas, haciéndose pasar por sacerdotes. Los hechiceros de Faraón fueron capaces de duplicar esta plaga con su magia, pero no pudieron eliminarla, por lo que solamente agravaron la situación, y el Faraón se vio obligado a conceder el permiso de salir a los israelitas a Moshe, a cambio de que éste accediera a acabar con la plaga.
Entonces el Faraón convocó a Mosheh y a Aharón y les dijo: "Intercedan con Yahweh para que quite las ranas de mí y de mi pueblo, y dejaré ir al pueblo para que sacrifique a Yahweh". Shemot 8:8
Para convencer al Faraón de que realmente la plaga era un castigo divino, Moshe dejó que el Faraón eligiera el momento en el que terminaría la plaga. El Faraón eligió como fecha el día siguiente, y todas las ranas murieron a la hora señalada. Sin embargo, el Faraón revocó su autorización, y los yisraelitas permanecieron en Egipto.
Y Mosheh le dijo al Faraón: "Le voy a dar a escoger: ¿Para cuándo debo interceder por usted, y por sus cortesanos, y por su gente, para que sean eliminadas las ranas de usted y de sus casas, y que queden solamente en el río?". "Para mañana", respondió él. Y (Mosheh) dijo: "Como usted diga; para que sepa que no hay nadie como Yahweh nuestro Elohim; las ranas se retirarán de usted y de sus cortesanos y de su gente; quedarán solamente en el Río". Entonces Mosheh y Aharón salieron de la presencia del Faraón, y Mosheh clamó a Yahweh sobre el asunto de las ranas que él había infligido sobre el Faraón. Y Yahweh hizo como pidió Mosheh; las ranas murieron en las casas, los patios y los campos. Y las recogieron en montones, hasta que el país quedó apestado. Pero cuando el Faraón vio que había alivio, se puso testarudo y no les hizo caso, como había dicho Yahweh. Shemot 8:9-15
Un predicador de la Besorah debe ser también capaz de exponer las "ranas". Esto significa que él debe ayudar a la gente a darse cuenta de que todos los disfrutes y preocupaciones del mundo son "ranas". Dado que las ranas son demonios, al decir que los verdaderos enviados deben saber exponerlos, estamos diciendo que ellos pueden expulsar demonios de otros:
Estas señales seguirán a los que creen: "En mi nombre echarán fuera demonios, hablarán nuevos idiomas, tomarán serpientes en las manos, y si llegan a beber algo venenoso, no les hará daño. Sobre los enfermos pondrán sus manos, y sanarán". Mordejai 16:17-18
Sin embargo, ciertos maestros de filosofía también pueden ayudar a la gente a darse cuenta de que los demonios los usurpan y los perjudican. Los enviados exponen la verdadera situación del vivir en el mundo, pero algunos "magos" o filósofos pueden hacer exactamente lo mismo, lo cual no debería sorprender a nadie, como ya dijimos, porque para ellos trabajan, lo sepan o no. Enseñamos a la gente que la vida en el mundo los usurpa. Algunos filósofos enseñan lo mismo. Por ejemplo, el taoísmo enseña la simplicidad y el hecho de no ser egoísta. Nosotros también enseñamos a la gente que el deleite de este mundo en realidad es una forma de muerte. Algunos filósofos también enseñaban esto.
No obstante, así como los magos egipcios no pudieron deshacerse de las ranas, tampoco los "magos" actuales pueden hacerlo con las "ranas", los demonios que molestan a la gente en la actualidad. Y no pueden porque ellos mismos los contienen. Como dijo Mashíaj:
"Todo reino dividido contra sí mismo está arruinado, y cae casa sobre casa. Pues si el Satán está dividido contra sí mismo, ¿cómo podrá permanecer en pie su reino? Luka 11:17-18
Los falsos profetas y magos del mundo pueden PRODUCIR ranas, ellos tienen contacto con la semilla de la serpiente y sus demonios y saben invocarlos en su favor, pero los enviados sabemos EXPONERLAS y también tenemos el poder para EXPULSARLAS.
Hasta este momento Moshe había actuado sólo en respuesta a instrucciones directas de Elohim. Ahora, en cambio, se había atrevido a fijar un tiempo definido para la eliminación de la plaga, aparentemente sin ninguna orden específica. Él mismo retó a Faraón, desafiándolo a aumentar la dificultad. Aquí vemos cómo la actitud del líder estaba comenzando a cambiar. A pesar de que las respuestas de Faraón no mudaron, él estaba cada vez más confiante en el Elohim a quien servía.
De manera que Moshe oró para que su propuesta tuviera la aprobación divina. Por primera vez Moshe aparece en el papel de alguien que conoce el poder ilimitado de la oración, a la que recurrió con frecuencia y con éxito durante los siguientes años difíciles de su liderazgo. Así también nosotros debemos recurrir a la oración con fe y con arrojo. Moshe no se limitó a orar para obtener algo, sino que desafió a Faraón, desafió a haSatán.
Cuando Moshe clamó a Elohim por causa de las ranas, Elohim hizo conforme a la palabra de Moshe, y las ranas murieron. En el mismo principio, un evangelista digno de este nombre no sólo expone a las "ranas", sino que también las quita de en medio, venciendo a los demonios de haSatán.
La Tercera Plaga: Los Jejenes
En esta tercera plaga no hubo una advertencia previa a Faraón. Si se dividen las nueve primeras plagas en tres grupos, vemos como las dos primeras de cada grupo fueron anunciadas previamente ante Faraón, pero no la última de cada grupo.
"Jenim", palabra probablemente derivada del egipcio jenemes ("jejenes" o "mosquitos"). La traducción "piojos" sigue la opinión del historiador judío Josefo y de los escritores talmúdicos, pero no tiene base lingüística. Los jejenes egipcios eran tan pequeños que apenas los percibía el ojo humano, pero tenían un aguijón que -de acuerdo con Filón y Orígenes- causaba una irritación sumamente dolorosa de la piel. Los jejenes aún existen en la actualidad y son exactamente iguales a como aquí descritos. También podríamos decir que se trata de pulgas. Los piojos no son intercambiables entre humanos y animales, pero las pulgas afectan a ambos por igual. Además los piojos se limitan al cabello, mientras que las pulgas atacan todo el cuerpo, produciendo irritaciones, aunque no tan dolorosas como las de los jejenes.
Esta plaga golpeó en el corazón de la adoración de todos los egipcios, especialmente a sus sacerdotes. Los sacerdotes Egipcios eran muy cuidadosos sobre la higiene y sobre los rituales de limpieza; una infestación de jejenes no les permitiría adorar a sus dioses. Además, la plaga también cayó sobre cada bestia. Los dioses de Egipto no recibirían el sacrificio de animales llenos de erupciones, así que esto detuvo su sistema de sacrificios.
Entonces Yahweh le dijo a Mosheh: "Dile a Aharón que extienda su vara y GOLPEE (NAKÁ, H5221) el polvo de la tierra, y se convertirá en jejenes en toda la tierra de Mitsráyim". Y así lo hicieron. Aharón extendió su brazo con la vara y golpeó el polvo de la tierra, y vinieron jejenes sobre hombres y bestias; todo el polvo de la tierra se convirtió en jejenes por toda la tierra de Mitsráyim. Shemot 8:16-17
Cuando Aharón extendió su mano con su vara y golpeó el polvo de la tierra, lo convirtió en jejenes. Polvo (AFAR, H6083) es lo que somos. Pero el mundo hace que del polvo salgan jejenes, no hombres. Las jejenes o jejenes aquí simbolizan la carne, los hombres carnales. En esta plaga, el polvo se convirtió en jejenes que molestaron mucho a los egipcios. No obstante, la plaga de las jejenes no fue solamente un castigo, sino también una revelación de que al fin y a la postre, el polvo de Mitzrayim produce insectos irritantes y agresivos, y no hombres. Esto es lo que haSatán hace con el mismo material con el que Yahweh nos creó a nosotros. Aquí está siendo expuesta también la humanidad que sigue a haSatán, sabiéndolo o no, y que sólo busca satisfacer su carne. A los ojos de Yahweh, esta humanidad no pasa de insectos irritantes.
En estas plagas, Elohim era sabio y también misericordioso. El no usó un arma poderosa para darles a los egipcios una lección de una vez por todas. Por el contrario, Él usó algo muy pequeño, que produjera irritación real en la carne, para que los mitsritas comprendieran que estaban siendo conducidos por su carne, y que las obras de la carne para nada aprovechan. En Su sabiduría y misericordia, Elohim usó a los jejenes para exponer la situación del vivir en Mitzrayim y alentar a Su pueblo a salir de Mitzrayim.
Yahweh hace lo mismo en principio hoy en día. El nos muestra continuamente que Mitzrayim es algo que no debemos amar, y nos recuerda que no debemos permanecer en Mitzrayim. Una y otra vez nos golpeará para que veamos la verdad, hasta que clamemos por salir. Recibiremos tantos más golpes cuanto más demoremos en despertar y en aceptar el hecho de que todo lo que proviene de Mitzrayim es muerte. Él nos hace ver que la vida en Mitzrayim es repugnante. Las aguas de sangre, de muerte, producen ranas, demonios, y sus hombres son jejenes, molestos e insignificantes. El sabe que si Su pueblo entiende claramente la situación en Mitzrayim, desearán ser separados de ella. Cualquier que consiga ver que para el mundo satánico no pasamos de piojos, deseará salir de allí para volver a ser humano. Mediante las plagas, el pueblo de Elohim debía entender que su vivir no debe ser como el mundo, sino un vivir para Elohim en el desierto.
La plaga de las ranas revela la naturaleza de los verdaderos habitantes de las aguas de Mitzrayim, los demonios nefilim, mientras que la de los jejenes revela la naturaleza del polvo de Mitzrayim, los seguidores de haSatán. Este es un juicio a la humanidad también. Por lo tanto, en Su juicio, Elohim expuso la verdadera naturaleza de las aguas y del polvo en su condición caída. El mostró que las aguas eran sangre, que el río sólo tenía demonios y que los hombres, el polvo, eran sólo insectos.
Esta plaga afectó a todos en Mitzrayim, tanto yisraelitas como mitsritas. Como éste es un juicio sobre el hombre, afectó a todos sobre la tierra. Pero como ya dijimos, no es el juicio aún sino la presentación de los cargos contra las partes acusadas, y la humanidad toda está acusada de seguir a haSatán. Al final de cuentas, todos nacemos con el pecado. Pero luego veremos que en la ejecución del juicio en sí, se establecerá separación entre los hijos de Yahweh y los hijos del mundo.
Esta plaga también tiene su paralelo en Hitgalut, que sorprenderá a muchos. Necesitamos encontrar una plaga de insectos que haya afectado tanto a creyentes como a incrédulos, sin causar daños mortales. Y la única que corresponde es LA QUINTA TROMPETA. En ambas tenemos estas características contempladas. Decir que "langostas" se corresponden a "langostas" (lo que nos han enseñado) es, como dije, una interpretación simplista y superficial... y muy equivocada. Las langostas de Shemot son la octava plaga, una de las más destructivas y completas, sombra de las copas y no de las trompetas, donde está esta plaga de langostas demoníacas.
Y del humo salieron langostas sobre la tierra, y se les dio poder como el poder que tienen los escorpiones de la tierra. Y se les dijo que no hicieran daño a la hierba de la tierra ni a ninguna cosa verde, ni a ningún árbol, sino solamente a los hombres que no tienen el sello de Elohim en sus frentes. Se les mandó que no los mataran, sino que los atormentaran por cinco meses. Su tormento era como el tormento del escorpión cuando pica al hombre. En esos días los hombres buscarán la muerte, pero de ninguna manera la hallarán. Anhelarán morir, y la muerte huirá de ellos. Hitgalut 9:3-6
Las langostas de Shemot devoraron todo lo que el granizo no había destruido, DE LAS PLANTAS VERDES. Pero a éstas de Hitgalut se les ordena, contra la naturaleza misma de las langostas, no tocar la hierba ni nada verde, SINO ATACAR A LOS HOMBRES. Este no es el comportamiento natural de estos insectos, y como vemos que además se les da "poder de escorpiones", con el cual atormentarán a los hombres PERO NO LOS MATARÁN, se desprende que estarán dotadas de un veneno que provocará mucho dolor pero no será mortal. Ellas surgen del abismo, podemos conjeturar que se tratará de algún arma biológicamente diseñada, animales robóticos, podemos levantar varias suposiciones, aunque eso es secundario en este momento. El dolor será tan terrible que los hombres desearán morir, pero no morirán. Evidentemente, NO PODEMOS ESTABLECER PARALELO CON LAS LANGOSTAS DE SHEMOT, dedicadas a terminar de consumir la tierra.
Las langostas de Hitgalut afectan tanto a creyentes como a no creyentes, Y LOS ÚNICOS QUE NO SERÁN AFECTADOS SON LAS PRIMICIAS. Un par de capítulos antes esto ya había quedado determinado:
Y vi que otro mensajero, que subía del oriente, tenía el sello del Elohim vivo. Y llamó a gran voz a los cuatro mensajeros a quienes se les concedió hacer daño a la tierra y al mar, diciendo: "¡No hagan daño a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que marquemos con un sello la frente de los siervos de nuestro Elohim!". Oí el número de los sellados: 144.000 sellados de todas las tribus de los hijos de Yisrael. Hitgalut 7:2-4
Hay varios problemas en interpretar estos pasukim para aplicarlos a TODOS los salvos. En primer lugar, la mención de un número limitado y muy determinado excluye que pueda tratarse de los salvos, porque de esos se dice en muchas partes que son "tan numerosos que no se pueden contar". De hecho, los llama "primicias", y sabemos que las primicias son únicamente una parte del todo, la primera y la mejor. En segundo lugar, la clara relación de estos sellados como siendo de las tribus de Yisrael, las cuales son mencionadas una por una para que no queden dudas. Aunque esto implica el concepto de las Dos Casas unidas y no se refiere a descendencia de sangre sino espiritual, ciertamente no habla de un "todos" que abarque la totalidad, sino un grupo especial, como ya estudiaremos en su momento, aunque quiero que vayan prestando atención al punto. Finalmente, en tercer lugar, y tal vez el más importante de todos: ESTE SELLO ES APLICADO ANTES DE LAS TROMPETAS, NO ANTES DE LAS COPAS. Esto demuestra que este grupo selecto —que les voy anunciando, se trata ÚNICAMENTE de aquellos que han vencido el galardón y han sido hallados dignos de ser reyes y sacerdotes, y que son
...los que siguen al Cordero por dondequiera que vaya. Estos fueron redimidos de entre los hombres, primicias para Elohim y para el Cordero. Hitgalut 14:4
Este grupo son PRIMICIAS, y las primicias NO SON LA MASA TODA. Esto es algo que ha incomodado a muchos porque todos quieren formar parte de ese grupo, pero se trata de personas muy especiales no en sí mismas, SINO EN LA DEDICACIÓN DE SUS VIDAS A MASHÍAJ. Estas personas son las que han dejado todo, literalmente, para seguir a Yahshua, obedeciendo a fondo Su orden de tomar sus maderos y dejar todo atrás. De manera que únicamente habrá un grupo especial (Filadelfia) que será guardado de las plagas de las trompetas.
Y del humo salieron langostas sobre la tierra... Y se les dijo que no hicieran daño... sino solamente a los hombres que no tienen el sello de Elohim en sus frentes.
¿Qué significa esto, que sólo unos pocos se salvarán? ROTUNDAMENTE NO. Ya dije que no vamos a entrar en ese tema aún, y que estas cosas son sólo adelantos, pero que debemos comenzar a comprender, porque Shemot son sus sombras. Significa únicamente lo que todos sabían antiguamente: QUE LA MAYOR PARTE DE LA CONGREGACIÓN PASARÁ POR LA TRIBULACIÓN (exceptuando las primicias), y que eso no implica únicamente ser perseguidos por los hijos del enemigo, sino que serán afectados por las trompetas. PERO NO POR LAS COPAS. Las Copas de la Ira están reservadas a los que han rechazado toda oferta de salvación. Que quede claro: LOS QUE SUFRAN ESTA PLAGA YA SON SALVOS, PERO DEBERÁN SER "BLANQUEADOS". No se perderán, ni serán lanzados al lago de fuego, pero pasarán por la tribulación, como está escrito. Este tormento es equivalente a las picaduras de los jejenes en esta plaga de Shemot.
¿Por qué esta plaga, bastante dolorosa, afectó también a los yisraelitas? PORQUE ELLOS TAMBIÉN HABÍAN MOSTRADO INCREDULIDAD Y REBELDÍA ANTE EL ENVIADO DE YAHWEH, ES DECIR, ANTE YAHWEH MISMO. Como sus miedos los retenían en Mitzrayim, porque en su interior pensaban cosas como "mejor aquí esclavo que quién sabe dónde", como después reclamarían:
¿No fue esto mismo lo que te dijimos en Mitsráyim: "Déjanos tranquilos, para que sirvamos a los mitsritas, pues es mejor servir a los mitsritas que morir en el desierto"? Shemot 14:12
Porque sus corazones estaban amarrados a la idea de que, por muy malo que fuera, lo mejor era Egipto, Yahweh permitió que sufrieran junto con los mitsritas.
De la misma manera, la plaga de las langostas también afectará a los rebeldes que han dejado todo "para último momento", para después, o que han creído las mentiras humanas acerca de falsos arrebatamientos, entre otros engaños. Para ellos, esta plaga será castigo por su rebeldía y su postura, pero no serán eliminados. Esta será una oportunidad más para que comprendan que han estado siguiendo caminos extraviados. Esto despertará a muchos, y los llevará a emprender una mudanza y acercarse a la restauración mientras aún tienen un poco de tiempo.
Espero que esto los espante y los sacuda, tal vez así comprendan que sólo los que sean encontrados en el campo TRABAJANDO serán separados, y que ese trabajo no es instrucción personal sino la edificación de la Novia. Es inútil esconder la cabeza e insistir en que "estamos entre los 144.000". Eso ya lo han reclamado tantos grupos que en vez de 144.000 ya habría que contar 144.000 millones, para que quepan todos los que presentan sus reclamos. Pero sólo los que han dejado TODO serán Sus primicias. Por supuesto, pueden buscar otras interpretaciones que conformen y calmen sus miedos, seguramente encontrarán falsos profetas que les digan cosas más agradables y los adormezcan de nuevo, pero cuidado, porque ésta es la época en que proliferarán y engañarán a muchos. Lo que está escrito, ESCRITO ESTÁ, y no depende de nuestras interpretaciones.
Los magos de Faraón intentaron producir jejenes, pero no pudieron hacerlo.
Los magos hicieron lo mismo con sus hechizos para producir jejenes, pero no pudieron. Las sabandijas permanecieron sobre hombres y bestias; y los magos le dijeron al Faraón: "¡Este es el dedo de Elohim!" Pero el corazón del Faraón se endureció y no les hizo caso, como había dicho Yahweh. Shemot 8:18-19
No dijeron que fue la mano de Elohim, sino el dedo de Elohim. Esto indica que Yahweh, el Elohim de los hebreos, era todopoderoso. En su entendimiento, Elohim sólo había usado Su dedo para hacer algo que ellos no podían hacer. Este era sólo el dedo de Yahweh que hería pero no mataba. Muy diferente seria Su Mano, y los sacerdotes egipcios sabían de eso. No obstante, el corazón de Faraón permaneció duro, terco, y él no escuchó a Moshe ni a Aharón, como Yahweh había dicho. Aquí se encierra la participación del sacerdocio de ambas partes. A partir de ahora, será Moshe y no Aharón quien use la vara, la justicia siendo aplicada, ya no más la misericordia.
En este mensaje mi intención no es enseñar a los santos que no deben amar al mundo, sino señalar el cuadro completo descrito en el libro de Shemot. Este cuadro se ocupa de exponer al mundo. Observemos cómo las plagas de la sangre, las ranas y los jejenes exponen al mundo actual. ¿Todavía desean permanecer en el mundo? ¿Todavía lo consideran como el mejor lugar para vivir y criar a sus hijos? Si quedamos impresionados por el cuadro que nos presenta el libro de Shemot, tendremos el deseo de salir del Mitzrayim actual. En Su misericordia, Elohim nos ha mostrado un cuadro claro que revela la naturaleza, significado y consecuencias de vivir en el mundo. El desea rescatarnos del mundo y llevarnos a Sí mismo, al monte Horev, el monte de Elohim. En este monte, no tenemos ninguna plaga de sangre, ranas, ni jejenes. Por el contrario, tenemos la luz, revelación, propósito, la presencia de Elohim y un futuro lleno del suplir de Elohim. ¡Qué contraste más grande entre la vida en Mitzrayim y la vida en el monte Horev! ¿Ustedes desean permanecer en Mitzrayim, con la sangre, las ranas y los jejenes, o desean ir con Elohim al monte Horev? Nadie necesita darnos el consejo de salir del mundo. Si vemos el cuadro descrito en Shemot, espontáneamente aborreceremos al mundo, huiremos de él, y nos reuniremos con Elohim en el monte de Elohim.
Antes de enviar la cuarta plaga, Yahweh dice que Él evitaría que ésta y las plagas siguientes afecten a los israelitas en Goshén.
Así, las tres primeras plagas habían sido experimentadas por todos, incluyendo a los israelitas. Pero las siete últimas plagas afligen solamente a los egipcios. Estas "últimas siete plagas" son distintas, es bastante interesante ya que encontramos esta frase en Hitgalut 15:1, con referencia a las plagas finales derramadas sobre una humanidad rebelde, las Copas de la Ira, hecho que se sigue al período de sufrimiento que vendrá sobre el pueblo de Yahweh (físico y espiritual) y sobre el resto del mundo. Y precisamente como en Egipto, el pueblo de Elohim del tiempo del fin será protegido de las siete últimas plagas...
El Juicio De Las Plagas
Si queremos captar la revelación presentada en el libro de Shemot, debemos ver que Elohim desea que Su pueblo le edifique una morada en la tierra. Pero el enemigo de Elohim ha usurpado a Su pueblo y lo mantiene en cautiverio en el mundo. Por lo tanto, en los primeros catorce capítulos de Shemot, vemos una lucha entre Elohim y Faraón, el representante de haSatán. En esta lucha, el juicio de Elohim sobre el mundo egipcio fue manifestado por medio de las diez plagas. No obstante, las plagas no fueron solamente un castigo, sino también la manera que Elohim usó para exponer la naturaleza, el significado, y el resultado de la vida en el mundo, es decir, la vida que ocupaba al pueblo de Elohim. Por tanto, las plagas que cayeron sobre los egipcios, no fueron solamente castigos, sino también advertencias de misericordia. Si los egipcios hubiesen recibido misericordia, habrían visto la naturaleza, el significado, y el resultado de la vida en el mundo.
Es bastante significativo que Elohim mandó diez plagas, y no nueve ni once, aunque en total tenemos 13 encuentros o conflictos de choque. En las Escrituras, el número diez representa la perfección o el vivir humano completo. Por ejemplo, nuestros diez dedos representan esta consumación. Y por eso las Escrituras, haciendo el paralelo, revelan que al final de esta era habrá diez reinos bajo el mando del AntiMashíaj. Estos diez reinos serán la expresión final de la vida humana caída. Para exponer la vida humana en el mundo, Elohim usó diez plagas.
Como lo he señalado, estas diez plagas se pueden dividir de varias formas para su estudio, una de ellas separarlas en dos grupos según la vara: las tres primeras de la mano de Aharón, las plagas de advertencia, de la misericordia, y las últimas siete de la mano de Moshe, la justicia. Pero también podemos separarlas en tres grupos de 3 cada una, siendo la última separada como única.
Según esta última división, hemos abarcado el primer grupo de plagas, las plagas de la sangre, las ranas y los jejenes. Las plagas de la sangre y de las ranas están relacionadas con el agua, mientras que la plaga de los jejenes está relacionada con el polvo de la tierra. Por lo tanto, en el primer grupo de plagas, el agua y la tierra quedaron expuestas y juzgadas. Todos dependemos del agua y de la tierra para nuestro sustento, son nuestra base, nuestra plataforma de vida y sustento. La provisión necesaria para mantener la vida humana proviene de estas dos fuentes. En las tres primeras plagas, Elohim expuso la naturaleza de la vida caída de la humanidad. Mientras Él lo hacía, Él mostraba que los recursos del sustento humano dan por resultado muerte, problemas e irritación.
El segundo grupo de tres plagas está relacionado principalmente con el aire. En la cuarta, quinta, y sexta plaga, el aire de Mitzrayim se contaminó. Las moscas llenaron el aire, y la pestilencia venía del aire y las cenizas que provocan úlceras fueron esparcidas por el aire. Por lo tanto, en el segundo grupo de plagas, el aire, otra cosa vital para la vida humana, fue atacado.
Elohim creó los cielos para contener lo bueno de la tierra y la tierra con el mismo propósito en cuanto al vivir humano. Por lo tanto, tanto los cielos como la tierra son para la existencia del hombre. No obstante, el hombre cayó. Según Su justicia, Elohim debería de haber juzgado tanto los cielos como la tierra inmediatamente después de la caída de Adam. Pero la intención de Elohim consiste en cumplir Su propósito eterno por medio del hombre. En lugar de juzgar todas las cosas, Elohim puso al universo bajo la redención de Mashiaj.
La redención de Mashiaj es un asunto de mucho peso, mucho más significativo de lo que nos podemos imaginar. Elohim estableció a Adam como la cabeza de toda la creación en Bereshit 1. En principio, cuando la cabeza se rebeló, toda la creación cayó bajo la maldición y debió ser juzgada inmediatamente según la justicia de Elohim. Toda la creación debió ser derrumbada. Elohim no puede tolerar nada que vaya en contra de Su justicia, santidad, y gloria; pero tampoco Él cambiará Su corazón acerca de Su propósito de tener una morada eterna entre los hombres. Por lo tanto, Elohim prefirió mirar a toda la creación bajo la redención de Mashiaj, lo cual a Sus ojos fue cumplido antes de la fundación del mundo (Kefá Alef 1:19-20; Hitgalut 13:8). Por ver a la vieja creación bajo la redención de Mashiaj, Elohim tiene la libertad de preservar al universo o juzgarlo y destruirlo. Debido a la redención de Mashiaj, Elohim es totalmente justo y recto al preservar el universo o al destruirlo.
Cuando Elohim ya no pudo tolerar más el pecado de Sodoma y Gomorra porque se habían rebelado en contra de Él y rechazaron la redención que Él había ordenado, habiendo así "colmado la copa", es decir, la medida establecida para ellos, esa parte de la tierra sufrió Su justo juicio. Esto sucedió muchas veces en la historia, y el único caso en que vemos que una nación se arrepintió, prolongando sus días (finalmente caería como todas en sus propias iniquidades) fue Nínive, a través de la predicación de Yonah.
En principio, pasó lo mismo en los tiempos de Moshe. Faraón y los egipcios rechazaron la redención ordenada por Elohim y por tanto quedaron desnudos y expuestos al juicio de Elohim. Ya que los hijos de Yisrael estaban todavía bajo la redención, el juicio de Elohim no los tocó. Shemot 8:23 es un pasuk crucial: "Y Yo pondré redención entre Mi pueblo y el tuyo". Aquí Elohim decía a Faraón que Él pondría redención entre Su pueblo y el pueblo de Faraón. Elohim cubrió a Su pueblo con la redención de Mashiaj, pero Faraón y su pueblo rechazaron la redención de Elohim. Por lo tanto, cuando Elohim mandó las plagas sobre los egipcios, éstos no estaban bajo la redención de Elohim, sino que estaban expuestos a Su juicio.
En la caída, el hombre pecó en contra de la justicia de Elohim y careció de la gloria de Elohim. No obstante, Elohim no vino con juicio. Entonces ¿cómo la justicia de Elohim pudo mantenerse? Según Bereshit 3:21, la respuesta está en la redención de Elohim. Las pieles de los animales que Elohim puso para cubrir a Adam y Javá señalan la redención de Mashiaj. Debido a la redención de Mashiaj, Elohim puede mantener justamente la existencia del universo.
En Shemot, Faraón y los egipcios no se preocuparon por la redención de Mashiaj. Ellos merecían ser juzgados por la manera en que trataron al pueblo de Elohim y sus muchas otras iniquidades. Por lo tanto, Elohim ejerció Su juicio sobre los egipcios por medio de las diez plagas. En la época de las plagas, los egipcios quedaron expuestos a los tratos justos de Elohim. No obstante, los hijos de Yisrael permanecían bajo la redención de Mashiaj, porque Elohim había puesto una redención entre ellos y el pueblo de Faraón.
En la actualidad, toda la tierra está todavía bajo la redención de Mashiaj. Si no fuese por la redención de Mashiaj, el sol, la luna, y los planetas se desintegrarían. Elohim retiene los cielos y la tierra en beneficio de la existencia del hombre.
En realidad, todo el mundo disfruta de los beneficios de la redención de Mashiaj, aunque no se dan cuenta de ello. Pero las Escrituras dicen que:
Él hace salir su sol sobre malos y buenos, y hace llover sobre justos e injustos. MattiYah 5:45
Qolasiyim declara que Elohim ha reconciliado todas las cosas a Sí mismo por medio de la muerte de Mashiaj:
...y por medio de él reconciliar consigo mismo todas las cosas, tanto sobre la tierra como en el cielo, después de hacer la paz mediante su sangre en el madero. Qolasiyim 1:20
La redención de Mashiaj es lo único que hace que esta tierra sea aún un lugar adecuado para la vida del hombre. Si la creación no estuviera bajo la redención de Mashiaj, se derrumbaría por completo. No obstante, Elohim extiende Su misericordia y mira a los incrédulos bajo la redención de Mashiaj para que tengan la oportunidad de arrepentirse y de recibir esta redención.
Toda la comida que comemos y toda la provisión de vida que disfrutamos se encuentran bajo la redención de Mashiaj. De otro modo, las aguas se convertirían en sangre, los peces en ranas, y la tierra produciría espinas o jejenes en lugar de granos, y del aire vendrían las moscas. Las diez plagas cayeron sobre Mitzrayim porque rechazaron la redención de Elohim.