1. EL HOLOCAUSTO

 

Ya mencionamos que el recordar que tenemos una naturaleza pecaminosa y tener ofrecer a Mashiaj como nuestra ofrenda por el pecado nos protegerá y preservará para servir a Elohim como sacerdotes. La ofrenda por el pecado era un aspecto básico en la santificación de Aharón y de sus hijos para ser sacerdotes. Ahora vamos a estudiar otros aspectos.

 

Ser Uno Con El Holocausto

 

La santificación de Aharón y de sus hijos para servir a Elohim como sacerdotes requería de dos carneros, además del becerro de la ofrenda por el pecado. En cuanto al primer carnero dice:

 

Después toma un carnero, y que Aharón y sus hijos pongan sus manos sobre la cabeza del carnero. Degüella el carnero, y toma su sangre y rocíala contra todos los lados del altar. Corta el carnero en secciones, lava sus entrañas y patas, y ponlas con sus pedazos y su cabeza. Convierte todo el carnero en humo sobre el altar. Es una ofrenda quemada para Yahweh, un aroma grato, una ofrenda al fuego para Yahweh. Shemot 29:15-18

 

Según estos pasukim, el primer carnero era muerto y cortado en pedazos. Esto, sin duda, se refiere a Mashiaj, quien fue muerto y cortado en pedazos. Sin embargo, nosotros también estamos incluidos en esto, ya que nos identificamos con Mashiaj. Esta identificación con Mashiaj es demostrada mediante la acción de Aharón y sus hijos al poner sus manos sobre la cabeza del carnero (pasuk 15).

 

Apreciamos mucho este asunto de la identificación con Mashiaj. Pero ahora debemos darnos cuenta también de que, en Mashiaj, con Él y por medio de Él, nosotros necesitamos ser muertos y cortados en pedazos. ¿Quién entre los creyentes está dispuesto a ser muerto y cortado en pedazos? Es dudoso que alguien desee tal cosa. Pero a fin de ser sacerdotes, necesitamos pasar por esto. Esto es el quebrantamiento y el someter la carne al madero (sacrificarla sobre el altar). Claro está, no nos matamos a nosotros mismos, sino Elohim nos matará en Mashiaj, y comeremos el Mashíaj que recibimos y hacemos crecer. Las Escrituras dicen que cualquiera que desee servir a Elohim como un sacerdote será muerto y cortado en pedazos por Él.

 

Cuando algunos oigan acerca de esto, tal vez protesten y digan: "No, no estamos de acuerdo con esto. ¿No son los becerros y los carneros tipos de Mashiaj? Mashiaj es el que fue muerto y cortado en pedazos. Esto no es algo que nos suceda a nosotros. En cuanto a esto Mashiaj es nuestro sustituto; Él nos ha reemplazado en esto". Si este es su concepto, USTEDES ESTÁN CALIFICADOS SÓLO PARA SER SALVOS; PERO NO PARA SER SACERDOTES. Si, Mashiaj fue clavado en el madero como nuestro sustituto. El nos reemplazó en llevar nuestros pecados cuando murió en el madero. Sin embargo, a fin de servir a Elohim como sacerdotes, debemos identificarnos con la muerte y el Mashiaj que fue cortado en pedazos por Elohim. El proceso de santificación no termina en la salvación.

 

Después de que el carnero del holocausto fuese muerto y cortado, sus intestinos y piernas eran lavados, y luego se quemaba todo el carnero sobre el altar como olor grato para Elohim. Esto indica que después de ser muertos y cortados, necesitamos ser lavados y pasados por el fuego. Según 29:4-5, Aharón y sus hijos eran lavados con agua y vestidos con las vestiduras sacerdotales. Este era el lavado inicial. Luego de esto, los sacerdotes debían ser uno con el carnero que había sido matado, cortado en pedazos, lavado y quemado.

 

 

La Comida De Yahweh

 

El pasuk 18 dice que todo el carnero debía ser quemado sobre el altar como una ofrenda quemada a Elohim, un olor grato para Él. La palabra hebrea para holocausto es OLÁ (H5930), en realidad significa "sacrificio que sube" (como sube el humo). Cuando se quemaba esta ofrenda sobre el altar, llegaba a ser un olor grato que subía a Elohim para Su deleite, y así establecía una conexión y comunión entre el cielo y la tierra. Esta es la razón por la cual en Bamidbar 28:2-3 se habla acerca del holocausto como la comida de Elohim, la cual lo satisfacía.

 

En el holocausto, Mashiaj es el que es quemado para alimentar a Elohim y satisfacerlo. Sin embargo, necesitamos poner nuestras manos sobre Mashiaj; esto es, necesitamos ser uno con Él, identificarnos con Él. Esto quiere decir que todo lo que somos y hacemos debe ser muerto y cortado en pedazos, lavado y quemado sobre el altar (el madero), completamente para el deleite y satisfacción de Elohim. Sólo entonces llegará a ser la comida de Elohim.

 

 

La Sangre Y La Fragancia

 

En Shemot 29 vemos dos asuntos importantes en cuanto al olá. El primero es la sangre que se rociaba alrededor del altar. Esta era para nuestra paz y satisfacción. El segundo era el olor grato que subía al cielo para la satisfacción de Elohim. La sangre redentora se rociaba sobre el altar en la tierra (prefigurando la sangre de Mashíaj que salvaría a todo el mundo, basta que lo acepte como Adón), y el olor grato subía al cielo para satisfacer a Elohim. Mashiaj derramó Su sangre para nuestra paz, y Él mismo fue quemado para satisfacer a Elohim como el holocausto para santificarnos como sacerdotes.

 

 

2. LA OFRENDA DE PAZ

 

El primer carnero era para el holocausto, pero el segundo era para la ofrenda de paz. Esta es un poco más complicada. El holocausto es sencillo: se mataba, se cortaba en pedazos, se lavaba y se quemaba. Se obtenía un doble resultado: el rociar de la sangre sobre el altar y el olor grato que subía a Elohim. La sangre es para que nosotros la miremos, y el olor grato es para que Elohim se deleite. Seguramente la sangre satisface a Elohim, pero ésta es para nuestra conciencia y paz.

 

¿Por qué ofrecemos a Mashiaj como el primer carnero, el del holocausto? Le ofrecemos de esta manera porque nos damos cuenta de que no hemos sido para Elohim y que no somos para Elohim. En cambio, siempre estamos para nosotros mismos. No podemos ofrecernos, necesitamos otra ofrenda, nuestro Mashíaj. Además, en vez de ser la comida de Elohim, lo hemos sido sólo para nosotros. Jamás hemos ministrado a nuestro Padre, sólo hemos satisfecho nuestra carne. Debido a que somos pecaminosos, necesitamos que Mashiaj nos redima. Él fue inmolado por nosotros, cortado en pedazos, y Su sangre fue derramada por nuestra redención. Ahora cuando miramos la sangre, tenemos paz, al saber que hemos sido redimidos. También el olor grato sube a Elohim para Su deleite y satisfacción. Como resultado, nuestro problema está resuelto y el hambre de Elohim satisfecha. Por lo tanto, tenemos paz, y podemos disfrutar más de Mashiaj y experimentar más de Él. Podemos experimentarlo como el segundo carnero, como la ofrenda de paz.

 

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La Sangre De La Ofrenda De Paz

 

Veamos ahora, en un breve esquema, el significado del segundo carnero.

 

Luego toma el otro carnero, y que Aharón y sus hijos pongan sus manos sobre la cabeza del carnero. Degüella el carnero y toma un poco de su sangre y ponla en el lóbulo de la oreja derecha de Aharón y en el lóbulo de la oreja derecha de sus hijos, y en el dedo pulgar de su mano derecha y en el dedo gordo de su pie derecho; y rocía el resto de la sangre contra cada lado del altar todo alrededor. Toma un poco de la sangre que haya sobre el altar y un poco del aceite de la unción y rocía sobre Aharón y sus vestimentas, y también sobre sus hijos y sus vestimentas. Así serán santificados él y sus vestimentas, así como sus hijos y las vestimentas de sus hijos. Shemot 29:19-21

 

En 29:20 nos dice que éste también fue inmolado. Sin embargo, éste no se cortaba en pedazos. La sangre del primer carnero se rociaba sobre el altar, pero con la sangre del segundo se hacía algo diferente. Notemos que la sangre se ponía sobre el lóbulo de la oreja, sobre el pulgar derecho, y sobre el pulgar del pie derecho. La sangre sobre la oreja indica que si queremos ser sacerdotes, necesitamos tener un oído que escucha a Elohim. No debemos hablar demasiado. Tal vez pensemos que era mejor que se le dijera a Moshe que pusiera la sangre sobre los labios o la lengua de Aharón, pero Yahweh siempre piensa diferente a nosotros. Ser un sacerdote requiere que escuchemos, no que hablemos. El pulgar de la mano representa trabajo, y el del pie, caminar. Por lo tanto, como sacerdotes debemos escuchar, trabajar y caminar apropiadamente. Esto también forma parte de la santificación de los sacerdotes. Nuestras orejas y pulgares necesitan de la sangre redentora. La sangre nos santifica, nos hace diferente a otros. Los que no tienen la sangre sobre sus orejas ni sus pulgares no han sido santificados para Elohim. Después de que Aharón y sus hijos habían sido lavados con la sangre de esta forma, estaban santificados para servirle a Elohim como sacerdotes.

 

Según el pasuk 20, la sangre del segundo carnero no sólo se ponía sobre la oreja y los pulgares, sino que también se rociaba sobre el altar. Este es un segundo tipo de aplicación de la sangre de la ofrenda de paz.

 

El tercer aspecto de la sangre de la ofrenda de paz es la santificación. Moshe tomó una porción de la sangre y del aceite de la unción y lo roció sobre las vestiduras de Aharón y de sus hijos. Con esto Aharón y sus hijos estaban totalmente santificados, ya que las vestiduras que cubrían sus cuerpos habían sido lavadas y ungidas. Como podemos ver, todo esto es EXTERNO, una cobertura. No se santificaba a Aharón y sus hijos sino a las vestiduras que los cubrían. Hoy nosotros tenemos esas vestiduras sobre nuestro nuevo hombre, en nuestro interior, de manera que la unción la recibimos allí (el aceite de la unción representa el Ruaj haKodesh).

 

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Dos Tipos De Unción

 

En Shemot 29 el aceite de la unción se menciona por primera vez en el pasuk 7 y luego en el 21. El pasuk 7 dice: "Luego tomarás el aceite de la unción, y lo derramarás sobre su cabeza, y lo ungirás". Esto se refiere a la unción de Aharón antes de matar las ofrendas. En primer lugar Aharón mismo era ungido sin la sangre. Esto es un tipo de la unción de Mashiaj que se menciona en Mizmor 133. En este salmo el ungüento se derramaba sobre la cabeza de Aharón y bajaba hasta las faldas de sus vestiduras. Esto representa la unción de Mashiaj de parte de Elohim aparte de la redención. La unción de Mashiaj, claro está, no requería el derramamiento de sangre.

 

Aharón no sólo fue ungido como un tipo de Mashiaj, sino también como una persona pecaminosa que estaba siendo santificada para servir a Elohim como un sacerdote. Debido a que Aharón y sus hijos eran pecaminosos, se necesitaba una segunda unción, una unción con el aceite de la unción y con la sangre redentora, YA QUE NI EL RUAJ NI LA SANGRE HABÍAN SIDO DERRAMADOS AÚN. En cuanto a esta unción la sangre se menciona primero, porque es la que propicia todo. A través de la sangre derramada Yahshua pudo ser hecho Ruaj vivificante. Esto indica que debemos tener primero la sangre redentora y después podemos participar de la unción del Ruaj.

 

La sangre de la ofrenda de paz es un poco compleja. Como ya vimos, hay tres pasos, tres aplicaciones: la sangre se aplicaba a la oreja, y al pulgar de la mano y al pie de los sacerdotes; luego se rociaba la sangre sobre el altar; y tercero, la sangre junto con el aceite de la unción se rociaba sobre las vestiduras de los sacerdotes. Todos estos rociamientos indican la santificación tanto del altar como del sacerdote en su obediencia (para escuchar, hacer y andar según el Ruaj), en la unión cabal de la sangre con el Ruaj.

 

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Otros Aspectos De La Ofrenda De Paz

 

Tomarás del carnero las partes con grasa –la cola gorda, la grasa que cubre las entrañas, la protuberancia sobre el hígado, los dos riñones con la grasa que tienen– y la cadera derecha; porque este es un carnero de ordenación. Agrega una hogaza plana de pan, una torta de pan de aceite, y una hojuela, de la canasta de panes ácimos que estará delante de Yahweh. Pon todos estos en las manos de Aharón y de sus hijos, y ofrécelos como una ofrenda de elevación delante de Yahweh. Recíbelos de sus manos y conviértelos en humo sobre el altar con la ofrenda quemada, como aroma grato delante de Yahweh; es una ofrenda al fuego para Yahweh. Shemot 29:22-25

 

Las partes del carnero que se mencionan aquí son las más exquisitas y dulces. Según los pasukim 24 y 25, estas partes, junto con el pan de aceite y el hojaldre del canastillo del pan sin levadura, debían ser quemados "sobre el altar, con el holocausto, por olor grato delante de Yahweh". Las partes internas y la grosura se quemaban completamente como comida para Elohim. Esto se confirma en Vayikra 3:11 y 16.

 

Las partes principales del segundo carnero eran el pecho y los hombros. La espaldilla derecha (traducida a veces erróneamente como muslo, ya que la espaldilla corresponde sólo al cuarto delantero del animal, no al trasero, por lo que, en una comparación con el cuerpo humano, correspondería a los brazos, específicamente a los hombros), los intestinos y la grosura se quemaban, junto con las tres tortas. El pecho derecho se mecía delante de Elohim. Esta era la ofrenda mecida, un tipo de Mashiaj en resurrección, y no se quemaba, sino que se daba a Moshe como su porción. El pecho izquierdo y la espaldilla izquierda eran la porción designada para Aharón y sus hijos. En este momento, siendo que Aharón es tipo de Mashíaj, Moshe era tipo de Yahweh mismo, por lo que la pieza derecha era de Yahweh, y la izquierda era de los sacerdotes.

 

Los hombros eran elevados, exaltados. Esta ofrenda elevada tipifica a Mashiaj en ascensión. Mashiaj resucitado es la ofrenda mecida, y Mashiaj ascendido es la ofrenda elevada. Al mismo tiempo, vemos que son las partes de las que el sacerdote-hombre debía alimentarse para cumplir con sus funciones: fortalecer el pecho para sostener el pectoral y fortalecer los hombros para sostener las piedras de ónice. En otras palabras, las partes que correspondían a Aharón eran las de Mashíaj, para cumplir con la función de sostener al pueblo sobre su pecho y sus hombros.

 

El pecho de la ofrenda de paz representa el amor, y los hombros la fuerza. Mashiaj resucitado tiene que ver con el amor y el ascendido con la fuerza. En el B'rit Hadashá la ascensión representa la fuerza y el poder. Mashiaj ascendido es un Mashiaj de poder y fortaleza, y estos aspectos eran transferidos al Sumo Sacerdote.

 

Repetimos para que quede claro: la espadilla derecha era quemada para Elohim, y el pecho derecho se mecía primero delante de Él y después se le daba a Moshe como su porción. La espaldilla izquierda y el pecho izquierdo eran elevados delante de Elohim y luego eran entregados a Aharón y sus hijos como su porción.

 

Ya vimos que necesitamos a Mashiaj como nuestra ofrenda por el pecado, como el carnero del holocausto para la satisfacción de Elohim y nuestra ofrenda de paz con todos sus aspectos. Una parte de esta ofrenda sirve de satisfacción para Elohim, y la otra para ministrar a los sacerdotes. Como sacerdotes, podemos disfrutar nuestra parte de la ofrenda de paz junto con el pan.

 

 

Un Reino De Sacerdotes

 

Conforme al B'rit Hadashá, la meta de la salvación que Elohim efectúa es hacer, de todos los creyentes en Mashiaj, sacerdotes para Elohim. Por lo tanto, si una persona es salva, pero fracasa en llegar a ser un sacerdote que sirve a Elohim, no podrá cumplir el propósito de Elohim ni satisfacer Su deseo. En el último libro del B'rit Hadashá, Hitgalut, vemos que todos los redimidos son sacerdotes de Elohim. En Hitgalut 1:5-6 se nos dice que Yahshua ha Mashiaj nos liberó de nuestros pecados con Su sangre e "hizo de nosotros un reino, sacerdotes para Su Elohim y Padre". Así también Hitgalut 5:10 dice que hemos sido hechos "para nuestro Elohim un reino y sacerdotes".

 

La tipología del Tanaj nos muestra que en primer lugar Elohim redimió a Su pueblo, luego los salvó, y después los educó. Estos tres asuntos se revelan en el libro de Shemot. Primero Elohim redimió al pueblo de Yisrael, luego los rescató y los liberó, y después de eso los educó. Mientras estaban en Mitzrayim, fueron redimidos, y luego fueron rescatados de allí. En el desierto disfrutaron de la provisión de Elohim. Finalmente, llegaron al monte Sinay, donde recibieron una educación divina. Allí Elohim vino a santificar a algunos de ellos para ser Sus sacerdotes.

 

 

Si estudiamos seriamente la revelación que se encuentra en las Escrituras, veremos que la intención de Elohim no era santificar sólo un número de Sus redimidos para ser sacerdotes. No, la intención de Elohim era santificar a TODO SU PUEBLO REDIMIDO. Esto quiere decir que Elohim quería que todo el pueblo fuera un reino de sacerdotes.

 

Ustedes serán para mí un reino de sacerdotes y una nación santa. Shemot 19:6

 

Sin embargo, debido a la degradación del pueblo, once tribus cayeron. Por lo tanto, Elohim escogió una de las doce, la tribu de Leví, para que fuesen Sus sacerdotes.

 

No debemos pensar que Elohim sólo quiere santificar como sacerdotes a algunos de entre Su pueblo, como tantos han pretendido, tanto judíos como católicos e inclusive otras ramas cristianas protestantes. Por el contrario, Elohim santifica a todos los creyentes de Mashiaj para ser Sus sacerdotes. Por esta razón, algunos maestros creyentes se refieren al sacerdocio de la Era de Shavuot como el sacerdocio universal. Ya que el sacerdocio es universal, no debe haber diferencia entre "sacerdotes y laicos". No debe existir ningún sistema de cleros y laicos entre los creyentes. Todos lo que creen en Mashiaj, todos los redimidos y salvos, deben ser educados y santificados para ser los sacerdotes de Elohim. Sin embargo, esto no significa que no haya "niveles", debido al crecimiento de cada santo, y que los más nuevos no deban someterse a los más avanzados, no en una sumisión ciega pero sí como a autoridades levantadas por Yahweh para prepararlos para convertirse, en su momento, en autoridades para otros. En el Reino de Yahweh, la autoridad no implica poder sino servicio.

 

Como se revela en el B'rit Hadashá, el deseo de Elohim es que todos los redimidos en Mashiaj sean Sus sacerdotes. No sólo se habla de esto en Hitgalut, sino también en Kefá Alef.

 

...para que también se los use como piedras vivas para edificar una casa espiritual, para que sean un sacerdocio santo, a fin de que ofrezcan sacrificios espirituales, agradables a Elohim por medio de Yahshúa el Mashíaj. Kefá Alef 2:5

 

Además, Kefá Alef 2:9 dice que los creyentes son real sacerdocio. Esto revela que la edificación de la Era de Shavuot de Elohim es que para que todo Su pueblo redimido ejerza Su sacerdocio.

 

 

Una Descripción Detallada De La Santificación

 

Aunque el B'rit Hadashá revela claramente que todos los redimidos deben ser los sacerdotes de Elohim, éste no provee un descripción de cómo podemos ser sacerdotes que sirven a Elohim de manera práctica. En el B'rit Hadashá no hay un relato detallado de cómo podemos realmente ser santificados para servir a Elohim como sacerdotes, sólo nos dice que Elohim quiere que seamos sacerdotes, pero no nos muestra cómo llegar a serlo. Sin embargo, en el Tanaj, en el libro de Shemot, hay un capítulo que nos da una descripción detallada de la santificación de los sacerdotes de Elohim. Este capítulo es Shemot 29. Este un capítulo precioso, que da testimonio de que Yahweh jamás pensó en abolir nada de nada, porque si no tomamos las partes antiguas, no tendremos la clave para practicar las nuevas, y viceversa:

 

Él les dijo: "Por eso, todo escriba instruido en el reino del Cielo es como un padre de familia que saca de su tesoro cosas nuevas y viejas". MattiYah 13:52

 

Esta es la verdadera unión de las dos Casas, porque el secreto para abrir el tesoro está en unir ambas.

 

Los creyentes de hoy conocen acerca de las palabras santificar y santificación. Si tenemos un corazón que desea una santificación completa en nuestra experiencia, debemos estudiar este capítulo. No sólo se trata del sacerdocio, sino particularmente, trata de la santificación.

 

La santificación es un tema importante. Quizá tanto como la justificación. Entre los creyentes existen diferentes enseñanzas acerca de la santificación, distintos conceptos, y no todos ellos son correctos. Se necesita un entendimiento como se describe en Shemot 29. En estos mensajes daremos una breve explicación de la santificación de los sacerdotes como se presenta en este capítulo. En parte ya hemos visto algunas cosas, pero ahora tenemos una comprensión más profunda de muchas de ellas.

 

1. Una Limpieza Cabal

 

Cuando Aharón y sus hijos estaban siendo santificados para ser los sacerdotes de Elohim, lo primero que debían conocer era que eran espíritus inmundos, que estaban sucios y necesitaban ser limpiados. No es muy agradable reconocer que estamos sucios y que necesitamos una limpieza cabal. Hablando desde el punto de vista físico, la inmundicia puede provenir de dos fuentes: desde adentro o desde afuera. Por un lado, podemos asociarnos con tantas cosas que nos ensucian y por otro, por nuestro propio sudor debemos bañarnos a diario. Por lo tanto, nos ensuciamos con lo que nosotros mismos producimos, y también asociándonos con cosas terrenales.

 

Nada de lo que entra al hombre desde afuera puede contaminarlo; pero lo que sale de él es lo que contamina al hombre. Mordejai 7:15

 

Yo uso la limpieza física como ejemplo de la limpieza que forma parte del proceso de santificación de los sacerdotes de Elohim. ¿Deseamos ser sacerdotes que servimos a Elohim? Si es así, debemos reconocer que estamos sucios y que necesitamos una limpieza. Por esta razón, en el capítulo 29 la santificación de Aharón y de sus hijos comienza con la limpieza, con un lavarse. Shemot 29:4 dice: "Y llevarás a Aharón y a sus hijos a la puerta del tabernáculo de reunión, y los lavarás con agua". Debemos limpiarnos de la inmundicia causada por lo interno de nuestra carne, y también de lo que proviene del contacto con las cosas de este mundo.

 

2. Vestidos Con Las Vestiduras Sacerdotales

 

Luego de que Aharón y sus hijos eran lavados con el agua, debían ser vestidos con las vestiduras sacerdotales. A fin de servir a Elohim como sacerdotes, necesitaban estar vestidos apropiadamente. Estas vestiduras se pueden comparar con unos uniformes, un vestido oficial, usado con un propósito específico. Las vestiduras sacerdotales no sólo cubrían la desnudez de Aharón y de sus hijos; éstas los calificaban para llevar a cabo el oficio de sacerdote. Shemot 29:5-6 dicen: "Y tomarás las vestiduras, y vestirás a Aharón la túnica, el manto del efod, el efod y el pectoral, y le ceñirás con el cinto del efod; y pondrás la mitra sobre su cabeza, y sobre la mitra pondrás la diadema santa". Los pasukim 8 y 9 continúan así: "Y harás que se acerquen sus hijos, y les vestirás las túnicas. Les ceñirás el cinto a Aharón y a sus hijos, y les atarás las tiaras, y tendrás el sacerdocio por derecho perpetuo". Estos pasukim nos dicen claramente que a fin de servir como sacerdotes, Aharón y sus hijos necesitaban estar vestidos con las vestiduras sacerdotales, y que ÚNICAMENTE AL SER VESTIDOS RECIBEN EL DERECHO DE SER LLAMADOS SACERDOTES.

 

Aharón, como el sumo sacerdote, llevaba varias capas de vestiduras. La primera eran los calzoncillos, que le cubrían desde los lomos hasta las rodillas, la parte más inmunda del cuerpo, ya que cubre los genitales, donde reside la capacidad de reproducción. Y lo que el hombre caído reproduce es lo mismo que es: pecado; por eso es una abominación que debe ser cubierta. Después Aharón se ponía la túnica, la cual podríamos llamar el manto interior. Sobre ésta, se ponía el manto exterior, el manto del efod. Luego se ponía el efod y el pectoral. Así que tenemos cinco capas: los calzoncillos, la túnica, el manto, el efod y el pectoral. Además, Aharón se cubría la cabeza. Como los sacerdotes, los hijos de Aharón usaban calzoncillos, una túnica y una pieza para la cabeza. Por medio de esto vemos que para servir como sacerdotes, primero debemos limpiarnos de nuestra inmundicia, y luego necesitamos cubrir nuestra desnudez con las vestiduras sacerdotales. Es importante darnos cuenta de esto, como seres humanos caídos, somos espíritus inmundos y también estamos desnudos a los ojos de Elohim. Por lo tanto, para ser sacerdotes de Elohim necesitamos ser lavados y vestidos.

 

3. La Redención Es Necesaria

 

Aquellos que quieren servir a Elohim como sacerdotes deben reconocer que son espíritus inmundos y que necesitan ser lavados, y que también están desnudos y necesitan ser vestidos. Además, todos debemos ver que mediante nuestro nacimiento natural somos pecado. Debido a que nacimos en pecado, tenemos la naturaleza de pecado. Por nacimiento somos pecadores, constituidos de pecado. Por lo tanto, aunque hemos sido lavados y vestidos y hemos resuelto el problema de nuestra inmundicia y desnudez, ¿qué hacemos con nuestra naturaleza? Ya que somos pecado por naturaleza, necesitamos ser redimidos.

 

Los creyentes usan comúnmente las palabras redención y redimido. Sin embargo, pocos creyentes reconocen de manera adecuada que a los ojos de Elohim la redención incluye tres cosas. En primer lugar, incluye una terminación. Debido a que somos pecadores, necesitamos ser terminados. Luego de que somos terminados, necesitamos ser redimidos, y lo que ha sido redimido, necesita ser restaurado. Por lo tanto, tenemos la terminación, la redención misma, y la restauración. ¿Cómo se puede llevar a cabo todo esto? Por esto, necesitamos a Mashiaj como nuestra ofrenda por el pecado.

 

En Shemot 29 se menciona la ofrenda por el pecado. Según este capítulo, la ofrenda por el pecado se mataba, era terminada y luego se cortaba en pedazos y se quemaba. Por ende, ésta hacía cenizas. Los intestinos de esta ofrenda se quemaban sobre el altar; lo que sobraba se quemaba fuera del campamento.

 

La ofrenda por el pecado aquí tipifica a Mashiaj. Mashiaj se unió a nosotros y ahora nosotros nos unimos a Él. Esta unión es representada por Aharón y sus hijos en la acción de poner sus manos sobre la cabeza del becerro que se usaba como ofrenda. De esta manera ellos se identificaban completamente con la misma. Esto quiere decir que al identificarse con la ofrenda ellos también eran matados, cortados en pedazos y quemados. En Mashiaj hemos sido terminados y hechos cenizas. A los ojos de Elohim, nuestra vieja naturaleza se ha hecho cenizas. Hemos sido totalmente terminados.

 

Aharón y sus hijos estaban sucios y necesitaban ser lavados. Estaban desnudos a los ojos de Elohim y necesitaban ser vestidos. Ellos eran pecaminosos por naturaleza y necesitaban ser redimidos ¿Desean ustedes ser sacerdotes que sirven a Elohim? Si es así, necesitan ser lavados, vestidos y redimidos.

 

Mashiaj efectúa la redención por medio de la ofrenda por el pecado. Esta redención implica una terminación. Elohim no redimirá nada que sea pecaminoso a menos de que esté terminado. Por lo tanto, en Mashiaj hemos sido terminados. Ya no queda nada de nuestra vieja naturaleza, sólo un montón de cenizas.

 

4. El Holocausto

 

En este capítulo 29 no sólo tenemos el becerro de la ofrenda por el pecado, también tenemos dos carneros, uno para el holocausto y otro para la ofrenda de paz. El holocausto es diferente a la ofrenda por el pecado. La ofrenda por el pecado puede ser considerada como un sacrificio, pero el holocausto puede ser considerado como un regalo. La ofrenda por el pecado tiene como propósito la redención, mientras que el holocausto es para tener comunión. La ofrenda de paz es para deleite y satisfacción. Por un lado, nos hemos identificados con el Mashiaj clavado en el madero como nuestra ofrenda por el pecado. Por otro, también estamos identificados con el Mashiaj resucitado. El becerro tipifica al Mashiaj clavado en el madero; los dos carneros representan al Mashiaj resucitado. El Mashiaj resucitado se ofrece a Elohim primero como el holocausto y luego como la ofrenda de paz; es una ofrenda doble, como la de los dos palominos y las dos cabras. Como aquellos que están siendo santificados para servir a Elohim como sacerdotes, no sólo tenemos a Mashiaj como la ofrenda por el pecado, sino también lo tenemos como el holocausto y la ofrenda de paz. Él es el becerro en muerte en el madero, y los carneros en resurrección.

 

Las ofrendas para la santificación de los sacerdotes tienen dos categorías principales. La primera es de la vida animal; y la segunda de la vida vegetal. En cuanto a la de la vida animal, tenemos al becerro y a los carneros. En cuanto a la vida vegetal, tenemos el pan, las tortas y los hojaldres. En cada categoría hay tres cosas.

 

Mashiaj es el clavado en el madero y el resucitado. Como tal, no sólo nos representa, sino que también nos incluye. Estamos incluidos en Él. Por lo tanto, cuando Él fue clavado en el madero, nosotros fuimos clavados en el madero con Él. Cuando resucitó y se presentó ante Elohim, nosotros estábamos con Él.

 

El Mashiaj resucitado es el holocausto. Este era ofrecido a Elohim para Su satisfacción completa. Todo el holocausto se quemaba sobre el altar como olor grato a Elohim. Esto es difícil de explicar. Por experiencia sabemos que cuando estamos identificados con Mashiaj en Su muerte, reconocemos que somos un montón de cenizas. Entonces, espontáneamente, estamos en resurrección. En resurrección, Mashiaj es nuestra porción, es un carnero ofrecido a Elohim como nuestro holocausto que satisface a Elohim plenamente. Por lo tanto, a fin de ser los sacerdotes, necesitamos ser lavados, vestidos y redimidos. Además, necesitamos a Mashiaj como el resucitado para ofrecerlo a Elohim para Su satisfacción.

 

5. La Ofrenda De Paz

 

El último paso de la santificación de los sacerdotes es ofrecer el segundo carnero, el de la ofrenda de paz.

 

La última parte del pasuk 29:9 dice: "Así consagrarás a Aharón y a sus hijos". Literalmente, la palabra hebrea traducida consagrar quiere decir "llenar sus manos", como ya vimos. Este también es el significado en los pasukim 29, 33 y 35. Por lo tanto, santificar a los redimidos de Elohim para que sean Sus sacerdotes requiere que sus manos sean llenadas.

 

Pocas versiones traducen de manera literal la palabra hebrea que significa llenar sus manos. Algunas traducciones usan consagrar; otras hasta usan la palabra ordenar. En realidad, lo que se nos presenta aquí no es una consagración ni una ordenación; es el llenar de las manos de los santificados. Hasta este punto, Aharón y sus hijos han sido lavados, vestidos y redimidos. Estos son los primeros tres pasos de la santificación. También han presentado a Mashiaj como el holocausto para la plena satisfacción de Elohim. Por lo tanto, su inmundicia ha sido eliminada, su desnudez ha sido cubierta, su naturaleza pecaminosa terminada, y han ofrecido a Elohim, a Mashiaj, para Su satisfacción. Sin embargo, sus manos todavía están vacías. A pesar de estos cuatro pasos, todavía tienen las manos vacías. ¿Cómo le pueden servir a Elohim como sacerdotes si todavía tienen las manos vacías? A fin de ser los sacerdotes que sirven a Elohim de manera práctica, necesitan tener sus manos llenas.

 

 

Vimos que el ser lavados, vestidos y presentar el becerro como la ofrenda por el pecado resuelve tres problemas. El lavado resuelve el problema de la inmundicia, ser vestidos resuelve el problema de la desnudez, y el presentar la ofrenda por el pecado resuelve el problema de nuestra naturaleza pecaminosa. Además, vimos que presentar el holocausto satisface a Elohim y lo hace feliz. Cuando Elohim huele el aroma del holocausto, Él puede decir: "Estoy satisfecho y contento". Sin embargo, los sacerdotes, que tienen las manos vacías, tal vez digan: "Oh Elohim, Tú estás contento, pero nosotros todavía tenemos hambre. Adón, no tenemos nada que llene nuestras manos ni nuestro estómago. Si, hemos sido lavados, y cubiertos. Nuestro pecado ha sido quitado, y Tú estás satisfecho. Pero, Adón, nosotros tenemos hambre todavía". Debido a esta necesidad mostraremos el último paso de la santificación de los sacerdotes: ofrecer el segundo carnero.

 

¡HalleluYah por Mashiaj como el segundo carnero! Este no es la ofrenda por el pecado que resuelve el problema del pecado; tampoco es el holocausto que satisface a Elohim. Este carnero es de la ofrenda de paz. La ofrenda de paz permite que los sacerdotes disfruten a Mashiaj con Elohim. O sea, tener la ofrenda de paz es estar preparados para el banquete con Elohim. La ofrenda de paz es para nuestro festín con Elohim. 

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