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EK - NECM 11 - Recibir El Quebrantamient

NECM 11

Recibir El Quebrantamiento

Al Sujetarnos A La Autoridad De Yahweh 

Algunos hermanos pueden ser silenciosos durante las reuniones, pero es posible que este silencio no sea una virtud que está mezclada con Elohim. Algunas personas son extrovertidas por naturaleza; cada vez que encuentran la oportunidad, hablan, y continuamente expresan sus opiniones. Esto absolutamente carece de Elohim. Otros hermanos y hermanas podrían mantener sus bocas cerradas aun si tuvieran que sentarse con otros por tres días. Ellos, al igual que a los que les encanta expresar sus opiniones, no tienen a Elohim en su manera de ser.

 

Aquellos que no hablan tienden a condenar a aquellos que les encanta hablar. Sin embargo, mientras condenan a los que son habladores y mientras interiormente aprueban su prudencia al hablar y el cuidado con que se conducen, el Ruaj haKodesh podría tocarlos y preguntarles: "¿Es esto una o dos naturalezas? ¿Esto proviene sólo de ti mismo o de la mezcla de Elohim contigo?". Algunas personas son impulsivas por naturaleza, mientras que otras son lentas y cuidadosas; sin embargo, la gente a menudo alaba a los de naturaleza lenta por ser muy apacibles y condena a los de naturaleza impulsiva por ser personas irritables. Sin embargo, las personas que son lentas también deben permitir que Elohim las toque para que sepan si su lentitud proviene de una o de dos naturalezas, es decir, si proviene de ellos mismos o de la mezcla de ellos con Elohim. Esto es un asunto muy serio.

 

Si todos permitimos que Elohim nos toque, los que son lentos se postrarán, comprendiendo que deben condenar su lentitud, y los que no abren sus bocas se darán cuenta de que deben condenar su silencio. ESTO SE DEBE A QUE NUESTRA MANERA NATURAL DE SER MATA A LA NOVIA, PUES HACE QUE LA NOVIA SEA INAPROPIADA. Nuestra manera natural de ser impide que Elohim se mezcle con el hombre. Éste es el elemento más fuerte de nuestra naturaleza humana, en el cual no se expresa la mezcla de Elohim y el hombre, pues no posee una naturaleza doble. Por lo tanto, es necesario que el madero quebrante y derribe nuestra manera natural de ser. El mayor problema en la vida de Novia hoy no es cómo combatir contra el pecado y el elemento del mundo, sino que más bien nuestro mayor problema es que tenemos demasiados elementos de nuestra manera natural de ser que son alabados por los hombres y que son tenidos por virtudes. Ésta es la mayor dificultad que tenemos en la vida de Novia hoy.

 

Las dos naturalezas, la naturaleza de Elohim y la del hombre, son edificadas sobre Mashiaj y sobre el quebrantamiento; LA EDIFICACIÓN NECESITA QUE SEAMOS QUEBRANTADOS. Con relación a Mashiaj, hay edificación; con relación a nosotros, hay quebrantamiento. Ser quebrantados es diferente de ser anulados; pues el quebrantamiento implica que nos sometemos bajo la mano de Elohim. Si por naturaleza yo soy una persona silenciosa en las reuniones, debo preguntarme si es Elohim en mí quien está callado o si soy yo el que está callado. Debo aprender a sujetarme a la autoridad de Elohim. Según este mismo principio, una persona habladora debe aprender a sujetarse a la autoridad de Elohim. Si hacemos esto en nuestras reuniones, los demás podrán percibir que la presencia de Elohim está tanto en nuestro hablar como en nuestro silencio, tanto en nuestra rapidez como en nuestra lentitud. Todos nuestros problemas tienen que ver con la medida en que Elohim se haya mezclado con nosotros y cuánto nosotros nos hemos mezclado con Elohim. La edificación de la cual se habla en MattiYah/Mateo 16 no es otra cosa que la edificación de estas dos naturalezas: la naturaleza de Elohim y la naturaleza del hombre.

 

 

Las Dos Naturalezas De Elohim Y El Hombre Son Edificadas En Nosotros

 

Las puertas del Sheol no podrán prevalecer contra esta edificación. Sin embargo, si continuamos viviendo conforme a nuestra personalidad y manera de ser, las cuales son caídas y terrenales, las puertas del Sheol nos vencerán, puesto que estas características estarán en las manos de haSatán. Nuestra amabilidad y nuestra irritabilidad estarán en las manos de haSatán, así como también nuestro silencio y nuestras palabras. Todo lo que es natural se encuentra en las manos de haSatán; son objetos terrenales que haSatán devora. Cuando vivamos en Elohim, cuando nuestro elemento y personalidad naturales sean quebrantados, y cuando permitamos que la mezcla de Elohim y el hombre se forje en nosotros, las puertas del Sheol no podrán prevalecer contra dicha edificación. Ésta es la Novia que posee autoridad.

 

MattiYah/Mateo 16 dice que todo lo que la Novia ate en la tierra habrá sido atado en los cielos y que todo lo que la Novia desate en la tierra habrá sido desatado en los cielos (pasuk 19). Algunos kadoshim a menudo citan MattiYah/Mateo 16 y 18 para decir que mientras dos o tres estén congregados en el nombre del Mashíaj, todo lo que ellos aten en la tierra habrá sido atado en los cielos y todo lo que desaten en la tierra habrá sido desatado en los cielos (16:19; 18:18, 20). Pero si aplicamos estos pasukim de esta manera nos sentiremos muy desilusionados, pues es posible que nosotros desatemos y Él no desate nada, y que nosotros atemos y Él no ate nada. Estas palabras no son una especie de "hechizo" que con sólo expresarlas se cumplen. No es así. TODO DEPENDE DE SI QUIEN LAS EXPRESA HA SIDO QUEBRANTADO, DE SI ELOHIM SE HA EDIFICADO EN ÉL, Y DE SI ÉL HA SIDO EDIFICADO EN ELOHIM. Éste es el punto crucial. Si Kefá, Juan, Yaakov/Santiago y Shaúl se reunieran en un mismo lugar, dirían que cuando ataban algo, era atado en los cielos, y cuando desataban algo, era desatado en los cielos. Cualquier cosa que ellos decían se cumplía porque eran personas que habían sido edificadas con la mezcla de Elohim y el hombre. Sin embargo, es posible que lo que nosotros digamos no se cumpla porque en nuestro ser no hay mucho de la mezcla de Elohim y el hombre.

 

MaAseh Shlichim/Hechos 19 narra cómo algunos judíos exorcistas ambulantes invocaron el nombre del Mashíaj Yahshua sobre los que tenían ruajim malos, diciendo: "Los conjuro por el Yahshúa que predica Shaúl", pero en lugar de que los ruajim salieran, el hombre, en quien los ruajim residían, saltó sobre ellos (pasukim 13-16). Así que, debemos tener mucho cuidado porque tal vez deseemos atar al enemigo, pero en lugar de que ello suceda, nosotros mismos resultemos atados; tal vez deseemos desatar a las personas, pero al final ni siquiera nosotros seamos desatados. Esto no tiene que ver con doctrinas ni con pronunciar ciertas palabras; más bien, es cuestión de si hemos sido derribados y quebrantados, y si la mezcla de Elohim con el hombre se ha forjado en nosotros. ¿Está la mezcla de la divinidad con la humanidad presente en nosotros? ¿Es nuestro vivir el producto de la mezcla de la divinidad con la humanidad? Ésta es la raíz de todos nuestros problemas.

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