PIEDRAS VIVAS
NECM 31
El Trono De Yahweh Es La Clave
Para Que Se Produzca La Mezcla
De Yahweh Con El Hombre
De inmediato estuve en el espíritu; y vi un trono que estaba puesto en el cielo, y sobre el trono uno sentado. Y el que estaba sentado era semejante a una piedra de jaspe y de cornalina, y alrededor del trono había un arco iris semejante al aspecto de la esmeralda... Después me mostró un río de agua de vida, resplandeciente como cristal, que fluye del trono de Elohim y del Cordero. En medio de la avenida de la ciudad, y a uno y otro lado del río, está el árbol de la vida, que produce doce frutos, dando cada mes su fruto. Las hojas del árbol son para la sanidad de las naciones... No habrá más noche, ni tienen necesidad de luz de lámpara, ni de luz del sol; porque Yahweh Elohim alumbrará sobre ellos, y reinarán por los siglos de los siglos... Tenía la gloria de Elohim, y su resplandor era semejante a la piedra más preciosa, como piedra de jaspe, resplandeciente como cristal. Hitgalut 4:2-3; 22:1-2, 5; 21:11
La Nueva Yahrushalayim, según se revela en el libro de Hitgalut, es la máxima expresión de la Novia, la manifestación de la Novia en la plenitud de los tiempos. La Nueva Yahrushalayim nos describe la condición perfecta de una congregación local. En Hitgalut 21 el universo está en una condición nueva. La Nueva Yahrushalayim es el conjunto de todos los creyentes de todas las generaciones, el cuerpo colectivo de todos los creyentes que han existido en todas las generaciones en el universo. Todo lo que pertenece a Elohim se encuentra en este cuerpo colectivo, y por medio de él se expresan el esplendor y la gloria de Elohim. El contenido de la ciudad es Elohim mismo, la plenitud de Elohim; la expresión de la ciudad es también Elohim mismo, la gloria de Elohim. Por lo tanto, podemos ver claramente a la luz del Ruaj haKodesh que el contenido de la Nueva Yahrushalayim es la plenitud de Elohim y que la semejanza de la Nueva Yahrushalayim es la gloria de Elohim. Internamente la ciudad está llena de Elohim, y externamente expresa a Elohim mismo. Esto es un cuadro que describe cómo debe ser una congregación local.
En condiciones normales una congregación puede alcanzar el punto de ser la plenitud de la Nueva Yahrushalayim. Una congregación local debe ser tan nueva como la Nueva Yahrushalayim. Toda la vieja creación pasará y vendrá a ser nueva en Elohim. De este modo, tendremos la mezcla de Elohim con el hombre, la mezcla del Creador con las criaturas. La plenitud del Creador vendrá a ser el contenido de las criaturas, y la gloria del Creador llegará a ser la expresión de las criaturas. Así que, ya sea que examinemos la Novia externamente o percibamos lo que hay en ella internamente, lo que veremos y percibiremos será Elohim mismo. Ésta debe ser la condición de la Novia. No importa cuánto hablemos acerca de la Novia, debemos ver que la Novia es la mezcla de Elohim con el hombre.
¿Cómo puede Elohim mezclarse con la Novia y expresarse por medio de ella? A fin de ver claramente la mezcla de Elohim con el hombre, tenemos que prestar atención a Hitgalut 22. Hitgalut 21 no nos muestra claramente la mezcla de Elohim con el hombre. Pero en el capítulo 22 el trono de Elohim es el centro de la ciudad, un río de agua de vida sale del trono, y a uno y otro lado del río de agua de vida está el árbol de la vida, que produce doce frutos, dando cada mes su fruto (pasukim 1-3). Por consiguiente, el trono es el factor que hace que se efectúe la mezcla de Elohim con el hombre. El factor principal para que se produzca la mezcla de Elohim con el hombre es la autoridad de Elohim, y el trono de Elohim es Su autoridad. Dondequiera que esté el trono de Elohim, allí estará la autoridad de Elohim. Elohim puede mezclarse con el hombre en la Novia debido a que el trono de Elohim con Su autoridad está en la Novia.
Todos los problemas que existen en el universo se deben a la oposición a la autoridad de Elohim. Todos los hijos de Elohim deben ver que éste es el problema básico en el universo. HaSatán se rebeló para derribar el trono y la autoridad de Elohim. Conforme a su maligna intención, haSatán hizo que el hombre se rebelara contra Elohim y Su autoridad. La humanidad cayó al grado de edificar de manera colectiva la torre de Bavel a fin de hacerse un nombre para sí misma, y de ese modo, rechazó a Elohim pública y desvergonzadamente para establecer su propio trono (Bereshit 11:3-4). Luego continuó con la edificación de la Gran Bavel a lo largo de la historia, con la culminación en la sociedad en la que hoy vivimos. Éste fue el último acto de rebelión contra Elohim y fue la manera en que el hombre negó la autoridad de Elohim al máximo. En toda la historia de la humanidad, lo que más ofende a Elohim es que el hombre niegue Su autoridad, que rechace Su autoridad. Como resultado de la rebelión, la humanidad entró en un largo periodo de oscuridad y caos, perdió la bendición de Elohim, produjo toda clase de corrupción y abrió la puerta al sufrimiento, a la muerte y al desastre.
Yahshua vino entonces a la tierra para efectuar la obra de redención. Durante Su vida en la tierra, Él fue completamente sumiso a la autoridad de Elohim. Yahshua el Nazareno vivió y anduvo en la tierra completamente sujeto a la autoridad de Elohim. Todas Sus palabras y acciones estaban sujetas al gobierno de Elohim, y Él reconocía plenamente la autoridad de Elohim. Él era un hombre que tenía mucho más que un buen comportamiento; Él era una persona que se sometía completamente al gobierno de Elohim. En los Evangelios vemos cómo Él se sujetaba completamente a la autoridad de Elohim. Estando sujeto a la restricción y gobierno de Elohim, Él pasó por la experiencia de la muerte y la resurrección para salvar a un grupo de personas que llegaría a ser la Novia. En el Día de Shavuot/Pentecostés Él hizo que estas personas se sometieran a la autoridad de Elohim, tal como Él lo había hecho. Esto estableció el trono de Elohim entre ellos. La presencia de Elohim estaba plenamente en medio de ellos, por cuanto reconocían Su trono.
En la torre de Bavel la humanidad desechó a Elohim por completo y negó Su autoridad. Sin embargo, en Shavuot algunos recibieron a Elohim en ellos y reconocieron plenamente la autoridad de Elohim. En Shavuot el trono y la autoridad de Elohim fueron establecidos en la Novia. Cuando la autoridad de Yahweh está en la Novia, la Novia está llena de luz, no de tinieblas; está llena de vida, no de muerte; y está llena de la bendición de Elohim, no de maldición.