Debido a la naturaleza impredecible del lupus, puede ser difícil determinar si realmente padece esta enfermedad, ya que podría presentar solo un síntoma o una combinación de estos. Sin embargo, los pacientes con lupus tienen varias características en común, como:
Fiebre ligera
Rigidez articular por la mañana
Fatiga extrema
Anemia (bajo conteo de glóbulos rojos)
Sensibilidad a la luz
Falta de aliento
Dolor en el pecho
Si experimenta uno o una combinación de los siguientes síntomas, lo ideal es consultar inmediatamente a un experto.
Tipos de Erupciones del Lupus
Un síntoma único del lupus es el brote de erupciones en la piel y puede determinar el tipo de lupus que padece con solo observar dichas erupciones. Si desarrolla de pronto cualquiera de las siguientes erupciones, busque inmediatamente asesoramiento médico:
Erupciones en forma de disco: si observa erupciones circulares en el área facial, como en la frente o las mejillas, podría padecer lupus eritematoso discoide (LED). Las erupciones podrían no dar comezón, aunque podrían presentar efectos de larga duración, como cicatrización y pérdida de pelo una vez que han amainado.
Erupciones papuloescamosas y en forma de anillo: las erupciones papuloescamosas son similares a las erupciones de la psoriasis, mientras que las que tienen forma de anillo presentan escamas en las orillas. Si observa cualquiera de estos tipos de erupción en su piel, podría padecer lupus cutáneo subagudo.
Erupción en mariposa: Si nota en sus mejillas erupciones grandes similares a una mariposa, es posible que padezca lupus cutáneo agudo.
El Lupus Podría Ocasionar Depresión
El lupus también podría ocasionar depresión clínica y las estadísticas muestran que ésta se encuentra presente en casi un tercio de los pacientes con lupus. La depresión clínica no es un tipo de tristeza que se experimenta temporalmente, sino un sentimiento prolongado de melancolía del que no puede liberarse.
Los investigadores no están seguros acerca de cómo se desarrolla la depresión clínica, pero la Fundación Americana del Lupus sugiere que podría deberse a la forma en la que el lupus afecta el sistema inmune. Si experimenta alguno de los siguientes síntomas, podría ser necesario consultar a un médico tan pronto como sea posible para obtener el tratamiento adecuado, como hábitos alimenticios saludables, ejercicio y el apoyo de sus seres queridos:
Tristeza general
Sensación de impotencia
Falta de energía
Problemas para dormir
Cambio en el apetito
Incapacidad para concentrarse
Menor interés en las actividades
El Lupus También Puede Causar Problemas Digestivos
El Johns Hopkins Lupus Center afirma que el lupus podría afectar su tracto digestivo con problemas como el reflujo, causado por la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE). Los medicamentos para el lupus también podrían causar problemas digestivos, como úlceras pépticas, por lo que este tipo de medicamentos no es muy recomendable.
En cambio, debería tratar de forma natural el tracto digestivo al consumir comidas pequeñas y saludables, mantenerse de pie después de comer y disminuir el consumo de cafeína para promover una recuperación digestiva rápida.
El Lupus También Puede Afectar la Tiroides
Su glándula tiroides representa un papel importante al ayudarle a regular las hormonas vinculadas a las funciones corporales, como el metabolismo, ritmo cardiaco, sistema nervioso y peso corporal. No hace falta decir que, esta pequeña glándula, que se localiza en la base de la garganta, es importante para tener un cuerpo saludable. Sin embargo, cuando se presenta el lupus, esta glándula puede causar problemas en la forma de hipotiroidismo o hipertiroidismo.
El hipotiroidismo se define como una tiroides de actividad baja y entre los síntomas encontramos fatiga, aumento de peso y mal humor. Por otro lado, el hipotiroidismo significa que la tiroides está activa en exceso y podría presentar síntomas como pérdida de peso, palpitaciones cardiacas y, posiblemente, osteoporosis. Es importante analizar la glándula tiroides durante el diagnóstico de lupus para recibir el tratamiento adecuado.
FUENTE: Mercola.es
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